La firma digital y el certificado electrónico son dos conceptos que son muy frecuentes en la actualidad y que, aunque están relacionados entre ellos, no son lo mismo, por lo que conviene conocer qué son cada uno de ellos y sus principales diferencias.
Para empezar, hay que saber que una firma digital es un mecanismo criptográfico que, cuando se aplica sobre un documento electrónico, hace posible que el receptor pueda identificar al firmante y saber que se trata de un documento original, es decir, que no tiene ninguna alteración. Con ella es posible firmar documentos de manera legal sin que sea necesario disponer de un certificado digital.
El certificado electrónico, por su parte, es un documento o certificación electrónica que es expedida por una Autoridad de Certificación (FNMT), a través del cual se vincula a una persona con una clave pública. Con ella se consigue confirmar su identidad y permitir que se realicen diferentes trámites a través de internet, firmando los documentos de forma digital.
El certificado electrónico puede ser de dos tipos, ya sea un certificado digital de persona física o un certificado digital de persona jurídica. Además, se puede instalar en el navegador o usado mediante un dispositivo de creación de firma, como sucede con tarjetas criptográficas como el DNI electrónico, HSMs o USB criptográficos, entre otros.
Principales diferencias entre firma digital y certificado electrónico
A la hora de hablar de sus diferencias tenemos que empezar por destacar que un certificado electrónico es una representación digital confiable de una identidad y que sirve tanto para firmar de forma digital como para identificarse en una aplicación informática, como sucede en la sede electrónica de una administración pública, mientras que la firma digital es un acto de firma sobre un archivo digital, sin que sea necesario imprimirlo. De esta manera, se firma un documento para evitar que pueda ser alterado.
De esta manera, el certificado electrónico es una de las posibles tecnologías de firma digital, siendo el certificado digital cualificado la tecnología que ofrece mayor seguridad jurídica. No obstante, existen otras tecnologías alternativas para firmar digitalmente.
También hay que destacar que son diferentes tipos de solución, ya que mientras que el certificado electrónico posee siempre un proceso de identificación y validación idéntico por una persona que es asociada a él, en la firma se pueden usar distintos sistemas para realizarla. De esta forma, en función de la rapidez o del nivel de la seguridad jurídica para la firma, se pueden distinguir entre cuatro tipos de firmas electrónicas: básicas, con códigos de un solo uso, biometría o certificado digital.
Teniendo en cuenta lo anterior, se puede concluir que mientras que el certificado digital identifica al titular al tratarse de una acreditación, la firma solo identifica al firmante de un documento en particular, y puede estar basado o no en un certificado digital, puesto que, como ya hemos mencionado, existen distintos tipos de firmas a las que recurrir.
Por último, también hay diferencias con respecto a su expedición, porque mientras que el certificado electrónico, como ya hemos mencionado, es expedido por una Autoridad de Certificación, la firma digital se realiza mediante un tercero de confianza que permita la firma de documentos de manera legal y segura.
De esta manera, aunque guardan relación entre ellos, el certificado digital y la firma digital tienen algunas diferencias, puesto que uno es una herramienta para poder llevar a cabo el otro, como sucede con la firma electrónica con certificado digital.
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