Vecinos del barrio de Gamonal: "Somos descendientes del Cid, no nos vamos a amilanar"

    • Vecinos de Burgos aseguran estar en contra de la construcción del boulevar en el que el Ayuntamiento de la ciudad pretende gastar ocho millones de euros
    • Están haciendo guardia en la zona donde deberían comenzar las obras para impedirlas

Grupos de vecinos del barrio de Gamonal se congregan hoy en la zona donde las excavadoras deberían haber hecho su entrada esta mañana. A lo largo del día, la atención a medios de comunicación, las asambleas y el decidir los turnos de guardia, han roto la calma en este barrio obrero de Burgos que desde hace cuatro días ha visto como sus calles se transformaban en una auténtico campo de batalla.

El motivo de las revueltas son las obras que el Ayuntamiento de Burgos pretende ejecutar en una de las principales vías de la ciudad, la Calle Vitoria, que supondría la reducción de carriles en ambas direcciones. "Es una calle con una afluencia de coches enorme y ahora quieren construir un boulevar que nos dejaría únicamente con un carril de ida y otro de vuelta. No tiene sentido, vamos a estar todo el tiempo con caravanas y esto no es Madrid ni Barcelona", explica Jorge, vecino del barrio.

"Es violencia política", asegura la presidenta de la Asociación de vecinos del barrio, Mila Calvo, que apunta que han tratado de reunirse con el Alcalde de Burgos, el popular Javier Lacalle y todo lo que han recibido ha sido un "no" por respuesta. "Tenemos un disgusto tremendo, pero la gente no se va a ir, se están crispando los ánimos"."Somos gente trabajadora"

Esta misma mañana, el presidente del Partido Popular en Burgos, César Rico, aseguraba que las obras continuarían pese a haberse paralizado este lunes por la concentración de vecinos en la zona en la que se produjeron los incidentes. "Ahora no es posible reanudar las obras, pero queremos que los vecinos sean conscientes de que continuarán" ha afirmando Rico que ha criticado además que "la violencia está ganando a una posición democrática por un grupo de personas radicales".

"Somos gente honrada, trabajadora", asegura Calvo que teme que la imagen que se está dando de su barrio en los medios de comunicación pueda confundir a la gente. "La construcción del boulevar es una imposición, pretenden gastarse ocho millones de euros en algo que la gente no quiere, el hecho de que tengan mayoría absoluta no les da derecho a no escuchar a los ciudadanos, no sé cómo no se les cae la cara de vergüenza".

"Ya ayer se vio cómo disminuyó la 'batalla campal', a la vez que crecía la participación ciudadana pacífica", asegura Alba Saíz, una joven vecina de la zona, a lainformacion.com. "Espero que así siga para que la imagen de Gamonal sea la de un barrio que sale a la calle para defender sus intereses".

La propia plataforma que se había constituido en Burgos contra la construcción del boulevar se disolvió el viernes para evitar verse afectada por los incidentes violentos. "Vimos el cariz que estaba tomando la protesta, la tensión y decidimos que cada uno actuase de forma individual para no perjudicar a la plataforma. Ahora se están haciendo asambleas en la calle y se está promoviendo que haya gente las 24 horas en la zona", relata Anabel Cabrerizo, integrante de la desaparecida plataforma.

"No nos vamos a amilanar"

"Este Ayuntamiento es uno de los más endeudados de Castilla y León, por lo que no creo que este sea el momento de meterse a hacer una obra como esa y más cuando esa avenida está en perfectas condiciones", explica Concepción, otra vecina de la ciudad, a lainformacion.com. "No estoy de acuerdo con la violencia pero parece que es la única forma de que el alcalde preste atención a los vecinos. Lo que tengo claro es que descendemos del Cid y no nos vamos a dejar amilanar".

Aparte del coste económico de ocho millones de euros y de la congestión del tráfico que prevén que supondría para la zona, los vecinos de la ciudad rechazan la construcción del boulevar porque, aseguran, "reduciría las plazas de aparcamiento. Ahora en esa calle caben 350 coches aparcados y lo que quieren es en su lugar construir un parking subterráneo donde sólo habría lugar para 250 coches", explica Jorge.

"Lo peor es que además pretenden cobrar a los vecinos 20.000 euros por una plaza de garaje que sólo podrían disfrutar durante 40 años. Aquí somos gente humilde, trabajadora, nadie dispone de esa cantidad", lamenta Cabrerizo. Un nombre: 'Méndez Pozo'

Cuando se les pregunta a los vecinos por qué creen que el Ayuntamiento no les escucha todos acaban pronunciando el mismo nombre: Antonio Miguel Méndez Pozo, director del grupo que posee el Diario de Burgos, presidente de la Cámara de Comercio y dueño de varias constructoras, entre ellas MBG, encargada de llevar a cabo la obra del boulevar.

"El señor Médez Pozo lo controla todo en esta ciudad, hasta el periódico es suyo", lamenta Jorge, "una persona que estuvo en la cárcel por corrupción, imagínate lo que le pueden importar los ciudadanos, sólo vela por sus propios intereses".

De momento, las protestas en el barrio burgalés han ganado interés en toda España. De hecho, "Gamonal" se ha colocado como trending topic en Twitter en numerosas ocasiones durante estos días y una petición ciudadana en change.org que exige que se paren las obras ya ha sobrepasado las 13.000 firmas.

"Si fuese bueno para la ciudad no nos rebelaríamos", asegura Cabrerizo, "pero no entendemo que este Ayuntamiento esté recortando en temas sociales y sin embargo quiera hacer una obra de esa envergadura y que nadie quiere".

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