En su comunicado, ha expresado su preocupación por "el deterioro de la situación humanitaria" a la que hacen frente las comunidades de Mpati, en la provincia de Kivu Norte, tras los enfrentamientos entre fuerzas gubernamentales y grupos armados a finales de marzo.
"Todas las partes en conflicto, líderes de grupos armados y combatientes individuales, deben no atacar a los civiles y respetar el Derecho Humanitario", ha dicho el jefe de la misión del NRC en el país, Mickael Amar.
"Familias, incluyendo muchas mujeres y niños, se han visto obligadas a huir en varias ocasiones. Su situación es increíblemente difícil", ha agregado. El organismo ha indicado que muchos de los desplazados ya se encontraban en una situación vulnerable.
Por ello, Amar ha reclamado a las partes en conflicto que "permitan a las agencias de ayuda humanitaria tener acceso a las comunidades que sufren necesidades, allí donde estén". "Si esto no ocurre, veremos empeorar una situación ya crítica de por sí", ha remachado.
El este de RDC ha estado sacudido por la inseguridad desde las guerras regionales entre 1996 y 2003, que se saldaron con millones de muertos. Decenas de grupos armados continúan ejecutando ataques en la zona.
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