Tras las grandes decisiones, las grandes preguntas

Los líderes europeos se han estudiado la lección y se han presentado al examen con una respuesta para todas las preguntas. Sin embargo, ahora quedan los cuadernos de ejercicios que desarrollen el tema y que otorgarán la nota definitiva a la larga cumbre de esta madrugada. Hay todavía muchas preguntas pendientes.

La teoría, por lo tanto, se la saben y la han aplicado correctamente: habrá recapitalización bancaria por valor de 106.000 millones de euros (siempre se habló de entre 90.000 y 110.000 millones), la quita griega será del 50% (la horquilla previa se movía entre el 40% y el 60%) y el Fondo de Rescate tendrá una capacidad de un billón de euros (aquí no ha habido sorpresas).

Además, y como alarde de buen estudiante, los dirigentes comunitarios han puesto alarmas a los dos países con mayores problemas en sus cuentas (y castigados a la postre por las tensiones de la deuda soberana).

A Italia le ha colocado una bandera roja (hay quien asegura que de la cumbre no han salido mayores concreciones porque no se fían de las aptitudes italianas para cumplir lo firmado); y a España, una naranja, ya que admite el buen planteamiento de las medidas de ajuste aprobadas por Moncloa pero le pide más en materia de empleo y control de las autonomías.

Así que puede que los líderes de la eurozona se den un sobresaliente por la cumbre. No obstante, quedan pendientes detalles no menos importantes que darán la verdadera medida de aprobado esta pasada noche.

- De la quita griega se ha dicho que podría ascender a un 50%. Sin embargo, la banca no parece tan dispuesta a perdonar la mitad de los créditos concedidos. Ya accedió a olvidarse de un 21% tras la reunión de julio y la mitad del volumen le parece excesivo. Bruselas tiene que negociar aún con el sistema el impacto real de esta medida.

Paralelo a esto, aunque sin salir de las fronteras helenas, otro de los avances de la cumbre es la ampliación en unos 30.000 millones del segundo rescate a Grecia, de forma que quedaría en unos 139.000 millones de fondos públicos y otros 100.000 de capital privado. 

- Del Fondo de Rescate faltan flecos esenciales (pese a que se denominen flecos): ¿cómo va a funcionar y cómo se va a erigir el colchón de seguridad del billón de euros? Dicho en cristiano, ¿cuánto va a aportar cada uno a ese billón, bien sea en efectivo, bien en forma de garantía.

No menos relevante es la creación de un vehículo especial garantizado por el fondo de rescate y en colaboración con el Fondo Monetario Internacional (FMI) con el objetivo de atraer inversiones de países emergentes como China para comprar bonos de países con problemas. De momento, tampoco se ha estimado cuántos fondos podrían lograrse con este instrumento.

- De la recapitalización de la banca, las dudas es cómo se lo tomarán las afectadas. Se sabe que serán necesarios unos 106.000 millones de euros y que los cinco afectados con nombre español deberían afrontar unos 26.000 millones.

La letra del acuerdo dice que las entidades deben recapitalizarse antes del 30 de junio de 2012. En primer lugar, deberán recurrir al mercado privado. Si no logran los fondos necesarios, tendrán que pedir ayudas nacionales. En caso de que el Estado miembro no pueda prestarlas, podrán recurrir al fondo de rescate de la UE.

El proceso se prevé largo, pese a que Zapatero ha querido rebajar la tensión asegurando que las cinco firmas nacionales implicadas (BBVA, Santander, CaixaBank, Bankia y Banco Popular) no tendrán problemas para cumplir. Ahora, falta esperar qué dicen las implicadas.