En declaraciones tras la Conferencia Sectorial de Educación, Ruiz ha subrayado que, tras "varias discrepancias entre los consejeros", el Ejecutivo ha aceptado que sea el equipo docente quien tenga "la última palabra" sobre esta cuestión.
De este modo, ha defendido que se tenga en cuenta la evaluación continua y global de los alumnos a la hora de determinar si obtienen o no su título, ya que "el Ministerio no reconocía en su orden la capacidad que tiene el equipo docente de tomar una decisión al respecto", cuando son los docentes los que llegado el momento pueden tener más criterio. "Hemos conseguido que el Ministerio acepte que la palabra final para dar el título de ESO y Bachillerato resida sobre el equipo docente", ha añadido.
Por otro lado, ha reafirmado la postura que ya tenía antes de entrar a la reunión con respecto al Plan de Convivencia y ha defendido que dicho plan debe respetar y escuchar a las distintas comunidades autónomas. "Nuestro punto de partida es que cada centro es el que tiene que determinar qué políticas y qué acciones tiene que llevar a cabo para conseguir una buena convivencia en el mismo", ha añadido.
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