A.Miguel Carmona: "Si tienes las manos sucias, no hay soluciones de izquierdas o derechas"

Su canción 'La chica de ayer'; los años de la Movida; de Malasaña, exactamente de la Calle de la Madera. Se pasaba horas y horas correteando detrás de un balón en la Plaza del Dos de Mayo, por esas calles desiertas de coches y ahora “¡no se puede caminar, demasiado tráfico y suciedad. No han cuidado nada!”, le dijo a una señora que lo paró por la calle. La señora le había dicho: “¡Siga usted así don Antonio, le veo por la tele y habla muy bien. Yo le votaré pero arréglenos el barrio!”.

Economista y profesor de la Universidad CEU San Pablo lleva muchos años de andadura política. Aunque siempre recalca, “soy profesor, no político”. Se afilió al Partido Socialista con 16 años y se pagó la carrera (en la Universidad Complutense de Madrid) con los reportajes que hizo en aquella época, entrevistando a Gadafi o a dirigentes del Frente Polisario.

Fue mano derecha de Joaquín Leguina, del que comenta "me enseñó mucho y todavía lo hace". Ahora lo es de Tomás Gómez, al frente de la secretaría de Economía del PSM, con el que mantiene un pacto de lealtad y buena amistad. "Tomás siempre defenderá lo que yo desee", comenta en su primera entrevista como candidato a 'El País'.

Su candidatura va enserio y posiblemente, haya sido de los pocos políticos que este verano no se ha tomado ni un día de vacaciones. Así, el 1 de agosto visitaba por la mañana el polideportivo municipal de la Casa de Campo, por la tarde se reunía con el gerente y los comerciantes del Mercado de Maravillas y por la noche estaba rodeado de representantes del mundo de la cultura para valorar los recursos del centro cultural Matadero.

Hasta hace unas semanas, los madrileños lo han podido ver hablando con técnicos medioambientales sobre la normativa y los niveles reales de polución en la ciudad, acompañado por el colectivo de taxistas, con la Asociación Amigos del Botánico preocupado por la caída de árboles o echándose un cubo de agua helada por la ELA y retando a la actual alcaldesa, Ana Botella.

"Cuando por delante solo se tiene futuro, la responsabilidad del presente es armarse de voluntad para alcanzarlo", escribía en un artículo publicado por el diario 'El Mundo'.

Este colchonero se sabe las alineaciones de memoria, pero cuando le preguntas sobre 'la operación del Vicente Calderón' se pone serio y dice que lo estudiará. “Lo he mirado por encima y aumentar la edificabilidad no le da beneficio a ningún vecino de la zona”, respondió. En el caso del Real Madrid y su ampliación comercial contestó en la misma sintonía. “Si me desmuestra el Real Madrid que va a ser beneficioso para la ciudad y sus vecinos, lo veré positivamente”, señaló.

Le preocupa Madrid y sus calles “llenas de basura”. Cuenta que la primera medida que haga cuando sea alcalde será limpiar Madrid, “ponerlo bonito y hacer que funcione”. ¿Cómo?. Con “una gestión eficiente”. Mejorar el transporte público porque, según explica, la actual alcaldesa ha reducido 272 líneas de autobuses. También se acuerda de los ciclistas y, sobre todo motero como es, no descuidará esos baches y zanjas que él mismo sortea cada mañana de camino a la universidad.

Fomentar el comercio. En un acto en la agrupación socialista de Latina, un ciudadano se levantó en medio de su explicación diciendo que Madrid había perdido esa 'seña de identidad' que tenían sus comercios y calles. Él tomó nota y calificó de 'odisea' el simple hecho de conseguir una licencia para abrir un establecimiento en la ciudad.

Entre sus propuestas también destaca un Plan de Vivienda Social. Afirma que hay 40.000 viviendas en propiedad de los bancos que están vacías,“habiendo gente con problemas de acceso a una”. Propone subir el IBI a los bancos por tener esos pisos vacíos y así, salirles rentable el alquiler social.

“He hablado con los bancos y les he dicho que en España son aquellos que te prestan un paraguas cuando hace sol y te lo quitan cuando llueve”, contestó. Pero ante dudas de inconstitucionalidad por la medida ya tiene 'plan B': “A través de un mecanismo de bonificaciones para conseguir que salga rentable”.

“Mi modelo de ciudad es Berlín”, cuenta. “No desde el punto de vista financiero, que está como Madrid arruinada de estos 25 años, sino porque su motor de recuperación es la cultura”. Un Madrid cultural. Distinto al de la Movida, pero lleno de vida en los barrios y centros culturales. Por ejemplo, a los alumnos de la Real Escuela de Arte Dramático ya les plantea montar una compañía para que hagan representaciones por las juntas de distrito y los colegios.

Huye de olimpiadas y de prometer proyectos megalómanos.“¡Si no hay dinero!”, comenta. Si gana será el primero en ir a hablar con su 'colega' Montoro para refinanciar la deuda de la ciudad. “Ampliar el plazo de nuestra deuda con tipos de interés más bajos como los que tenemos ahora. No todo es ahogar al ciudadano”, explica convencido.

“¡Como que Montoro te va a hacer caso...!”, le responden sus amigos. Pero vuelve a sacar el 'conejo de la chistera' y aporta otro 'as en la manga' como el de subir el IBI a los bancos. “Estamos planteando tasas que cumplan lo que propongo, que no es nada fácil. Primero me tiene que decir 'no' y luego ya lo plantearé en un foro económico”.

“Pondré mi programa encima de la mesa y quien lo quiera votar que lo vote. Ya sea IU, UPyD, Ganemos...”, advierte sobre posibles pactos. Una cosa se le escapa: Su rival más directo.“Me gustaría que Mariano Rajoy eligiera candidato antes del 24 de mayo”, apunta.

Entre Cifuentes y Aguirre no ve a ninguna de las dos.“Nadie sabe qué piensa Rajoy, ni sus propios votantes. Rajoy es como el gas sarín: te liquida, pero no sabes que te está liquidando”, advierte tras la reciente salida del ministro de Justicia, Alberto Ruiz-Gallardón.

Vuelve a su máxima preocupación. Hay que recortar gastos y sacar la deuda del Ayuntamiento. “Tienen 305 cargos políticos! ¡Yo no tengo ni 305 amigos!”, señala para añadir con cara más seria: “El alcalde de Madrid no es Ana Botella, sino Antonio Beteta, que además de secretario de Estado de Administraciones Públicas, es quien tiene intervenido Madrid, controlando sus gastos factura a factura”, suscribe.

Apenas unos meses para que Madrid encuentre alcalde y Antonio Miguel Carmona ya tiene a Madrid metido en su cabeza. Se marcha contento de la entrevista recordando:“No quiero superar a nadie, me quiero superar a mí mismo”.