El Gobierno pospone la reforma de las pensiones a marzo o abril del año que viene

  • El nuevo ministro de Trabajo, Valeriano Gómez, ha dicho que el proyecto de ley de reforma de las pensiones estará listo "para el tercer o cuarto mes" de 2011 después de "agotar" el diálogo con los agentes sociales. Respecto a la idea inicial de elevar la edad de jubilación a los 67 años, el ministro se ha limitado a decir que el alargamiento de la jubilación "debe figurar" en la propuesta del Gobierno.
Gómez pedirá a los grupos que aceleren el Pacto de Toledo
Gómez pedirá a los grupos que aceleren el Pacto de Toledo
Beatriz Toribio

La reforma de las pensiones no va a ser tan urgente como se había propuesto el Ejecutivo en un principio. Hasta ahora el Gobierno había defendido que la reforma debía de estar lista antes de que acabara el año. Así se lo comunicó a Bruselas, a los organismos internacionales y a los ciudadanos españoles. Y a ello se comprometía el propio Zapatero el pasado mes de septiembre en la reunión del FMI en Oslo. Pero hoy el nuevo ministro de Trabajo ha anunciado que la idea del Ejecutivo es que "en el tercer o cuarto mes del año [próximo] haya un proyecto de ley en pensiones".

Las declaraciones de Valeriano Gómez tras una breve reunión con los portavoces de la Comisión del Pacto de Toledo dejan claro que el nuevo objetivo del Ejecutivo prima más el diálogo que las reformas en sí. El ministro ha explicado que después de que esta comisión parlamentaria elabore sus recomendaciones al Gobierno para la reforma de las pensiones (algo que está previsto para el próximo mes de diciembre), éste se sentará a hablar con sindicatos y empresarios "a la vuelta de Navidades o a la mitad de enero" y concluido ese diálogo "se presentará el proyecto de ley".

Gómez ha afirmado que el Ejecutivo de Zapatero afronta esta reforma con la "idea de agotar" el diálogo con los agentes sociales y alcanzar en esta reforma "un alto grado de consenso".

Una reforma en plenas elecciones municipales

Pero el nuevo calendario que anuncia ahora el Gobierno plantea varias preguntas. La primera es que si esta reforma se pospone a marzo o abril del año que viene, el debate sobre la reforma de las pensiones coincidirá en el tiempo con la campaña electoral de las elecciones municipales y autonómicas, previstas para mayo de 2011.

La clase política suele evitar temas tan sensibles en la opinión pública, como la reforma de las pensiones, en plena batalla electoral. Por lo que este nuevo calendario podría plantear más de un problema al Gobierno y al resto de la oposición.


¿Qué pasa con los compromisos del Gobierno con Bruselas?

Pero además, España prometió a la Comisión Europea una serie de reformas urgentes para conseguir el objetivo de reducir el déficit público y cumplir así con mayor celeridad el compromiso de situarlo en el 3% del PIB en el año 2013. Si el Gobierno no tendrá listo el proyecto de ley de reforma de las pensiones  hasta marzo o abril del año que viene, esto significa que no estará definitivamente aprobada hasta finales de 2011 o principios de 2012 ya que su trámite parlamentario en el Congreso y el Senado se alargará durante varios meses.

De esta forma, el Gobierno español podría enfrentarse a algún toque de atención por parte de Bruselas que lleva años reclamando una reforma de calado en el sistema de pensiones español.  El último toque de atención de la Comisión se produjo ayer mismo: Bruselas pedía a Zapatero más reformas si quiere diferenciarse de Irlanda y Portugal.

Además, el retraso podría ser un nuevo arma de los mercados contra España.


¿Se subirá la edad de jubilación a los 67 años?

Preguntado por uno de los puntos más polémicos de la reforma -la propuesta del Ejecutivo de elevar la edad oficial de jubilación de los 65 a los 67 años-, el nuevo ministro de Trabajo no ha querido ser muy explícito sobre si el proyecto de ley incluirá o no este punto. Valeriano Gómez se ha limitado a decir que para afrontar "el nuevo reto demográfico" al que se enfrenta España, el nuevo sistema de pensiones debe contemplar un "alargamiento de las pensiones" y que en las propuestas para esta reforma "debe figurar" esa idea, pero no ha especificado topes.

"Si cada vez vive más, es evidente que el esfuerzo debe agrandarse y no hay forma de desconocer este reto a medio y largo plazo", ha añadido.

El ministro se ha mostrado convencido de que es posible alcanzar el consenso en el seno de la Comisión del Pacto de Toledo y que la congelación de las pensiones no tiene que ser un impedimento para llegar a un acuerdo.

Mostrar comentarios