"Estoy embarazada", gritó Samsam Haji-Ali cuando el acusado empezó a golpearle en el estómago. Sin embargo sus avisos pasaron inadvertidos para David Gallarcher que continuó pateando a la mujer musulmana.
La paliza finalmente le costó el bebé. Ahora ha sido condenado a tres años de cárcel, según informa The Independent. Ha ocurrido en Bletchley, Buckinghamshire (Reino Unido).
Después de la paliza, la mujer de 34 años de edad empezó a sangrar y acabó tirada en el suelo. Tras el asalto tuvo que abortar a sus gemelos varias semanas más tarde. Su marido, Abdullah Sulamain, de 40 años, también se quedó necesitando puntos de sutura después de ser golpeado con una botella de vino durante el ataque.
Así empezó el encontronazo. La joven musulmana se encontraba en su coche cuando Gallarcher se acercó y le dijo: "Vienes aquí con tu traje de payaso, sois el p.. problema de este país". El marido trato de mediar y el agresor empezó a golpearle con una botella de vino y a patear el estómago de la musulmana.
"Había un elemento racial en este ataque, el acusado es un racista malhumorado en el lenguaje que usó con esta señora". Durante el juicio se demostró que el embarazo de Samsam Haji iba bien y que la pérdida de los gemelos fue causa directa de la paliza.
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