El presidente de Agbar recuerda que el agua ya es un servicio municipal bajo control público

  • Simon cree que detrás del movimiento de la remunicipalización hay "motivos ideológicos"
EUROPA PRESS

El presidente ejecutivo del Grupo Aguas de Barcelona, Àngel Simon, ha afirmado que el agua ya es un servicio municipal sujeto a control público en el Área Metropolitana de Barcelona y ha asegurado que detrás de los movimientos de algunos ayuntamientos por la remunicipalización del agua hay "motivos ideológicos y de control político".

En un discurso con motivo del Día Mundial del Agua, Simon ha respondido así a la reciente creación de la Asociación de Municipios para la Gestión Pública del Agua, promovida por los ayuntamientos de Barcelona, Badalona, Cerdanyola del Vallès, El Prat de Llobregat, Sabadell, Santa Coloma de Gramenet y Terrassa.

"El agua ya es un servicio municipal, ya hacemos lo que vosotros queréis, no confundamos lo que es un control público, que lo hace el regulador, con un control político", ha manifestado Simon.

El presidente de Agbar ha añadido que "lo importante es prestar un servicio de excelencia y el control público lo pueden hacer cuando quieran porque el agua es un servicio municipal".

MOTIVOS

"Si no hay conflicto social, si el servicio es excelente y si la satisfacción de los ciudadanos es máxima, pienso que detrás de la remunicipalización sólo hay motivos ideológicos", ha sostenido.

Simon ha recordado que el Grupo Aguas de Barcelona está presente en 71 lugares en el mundo y ha afirmado que, entre otras cosas, es porque saben que la compañía está presente en la ciudad de Barcelona.

El presidente de Agbar ha pedido a sus trabajadores que pongan en valor el trabajo de la compañía y ha puesto como ejemplo la rápida reparación del colector de Llevant después del temporal del mes de enero, reprochando que "alcaldesas que no se han puesto al teléfono ni una sola vez, sí que entonces llamaron rápidamente para que se arreglara".

SERVICIO EFICIENTE

"Tendréis que aguantar los insultos que estáis recibiendo, algunas veces desde el AMB y desde otros lugares, y poner en valor la eficiencia del servicio, porque no vale sólo decir que se podría ser más barato si el agua se gestiona de forma pública", ha dicho.

Simon ha rememorado otros conflictos que ha vivido la compañía con las administraciones públicas, como en 1914, cuando se atribuyó a Aguas de Barcelona la propagación del tifus, "cuando finalmente se detectó que los focos de la producción de tifus coincidían con las fuentes públicas que gestionaba el Ayuntamiento, un ejemplo de gestión pública de lo que puede pasar".

Mostrar comentarios