Llevaba semanas siendo objetivo de duras críticas desde los medios de comunicación estatales. Solo era cuestión de tiempo.
Presuntos tratos de favor y tráfico de influencias en conjunción con su millonaria esposa Yelena Baturina, desatención a los ciudadanos moscovitas el pasado verano cuando los incendios amenazaban a la capital mientras él seguía disfrutando de sus vacaciones estivales... Pero los verdaderos motivos que ha llevado a Dimitri Medvédev a destituir al alcalde de Moscú son otros.
El alcalde de Moscú, Yuri Luzhkov, ha gobernado la capital rusa desde 1992, pero enfadó a Medvédev al criticar su administración y sugerir que el país necesitaba de un líder más fuerte y decidido, una declaración en las que parecía favorecer al primer ministro Vladimir Putin.
El enfrentamiento con Luzhkov fue considerado por una gran mayoría como una prueba para Medvédev, socio más joven de Putin en el tándem dirigente de Rusia, de cara a las elecciones presidenciales de 2012.
Medvédev, en visita de estado a China, ha publicado esta mañana un decreto despojando a Luzhkov de su puesto "porque ha perdido la confianza del presidente de la Federación Rusa", según la portavoz del Kremlin Natalia Timakova.Prueba de autoritad y de autoritarismo
El presidente ruso se ha aprovechado de uno de los aspectos autoritarios de un régimen que se pretende mostrar como democrático: la constitución de Rusia permite al presidente despedir al alcalde de Moscú y a los gobernadores regionales y designar un sucesor sin necesidad de elecciones.
Este lunes, Luzhkov, de 74 años, que acababa de regresar de unas vacaciones de una semana en el extranjero, prometió no dimitir por propia voluntad, un desafío que el Kremlin no podía ignorar.
Sin embargo, la decisión de Medvédev de sustituirlo sugiere que Luzkhov no ha salido perdiendo del todo.
El decreto presidencial ha nombrado a un viejo aliado de Luzhkov, el primer vicealcalde Vladimir Resin, como alcalde en funciones de Moscú. Resin lleva desde 2001 como segundo del ayuntamiento en el que asumió la responsabilidad del sector de la construcción de la ciudad.Sospechas de corrupción en la alcaldía de Moscú
Una de las principales acusaciones contra Luzkhov es sobre el presunto trato privilegiado que habría dado el Ayuntamiento a las empresas de construcción de su esposa, Elena Batúrina, la mujer más rica de Rusia. También se han lanzado acusaciones de cohecho y tráfico de influencias contra la alcaldía.
En octubre pasado estalló un escándalo cuando el diario financiero ruso Vedomosti publicó fotografías de extravagantes relojes de lujo en las muñecas de la élite nacional, un caso similar al del Gürtel en España.
Por entonces, Resin fue fotografiado llevando el reloj más caro, reconocido por los expertos como hecho en la suiza DeWitt Academia Tourbillon Differentiel en oro rosa, con un valor de más de un millón de francos suizos antes de impuestos (unos 750.000 euros).
Las sospechas de corrupción han sido el centro de programas de la televisión estatalen el último mes, coincidiendo con las críticas de Luzhkov a Medvédev que apenas aparecieron en un artículo de la prensa estatal.
En el artículo en la Rossiiskaya Gazeta del 6 de septiembre, Luzhkov criticó la falta de eficacia de la administración de Medvédev y dijo que "el Gobierno ruso necesita recuperar su verdadera autoridad".
El actual mandato del alcalde tenía previsto expirar en junio, pero los analistas han dicho que el Kremlin quería dar al sucesor tiempo para asentarse y asegurarse un fuerte respaldo electoral para el gobernante partido Unidad Rusa en las elecciones parlamentarias de finales de 2011.
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