Los toros ofrecen en Cuéllar un primer encierro rápido y con bonitas carreras

  • La villa de Cuéllar ha celebrado esta mañana el primero de los cinco encierros con motivo de las fiestas de la Virgen del Rosario, caracterizado por la fuerza y la nobleza de las reses de la ganadería de Adelaida Rodríguez, que han ofrecido un recorrido rápido y con bonitas carreras en el tramo urbano.

Segovia, 28 ago.- La villa de Cuéllar ha celebrado esta mañana el primero de los cinco encierros con motivo de las fiestas de la Virgen del Rosario, caracterizado por la fuerza y la nobleza de las reses de la ganadería de Adelaida Rodríguez, que han ofrecido un recorrido rápido y con bonitas carreras en el tramo urbano.

Los encierros -considerados los más antiguos que se celebran en el mundo- han sido seguidos hoy por más de 10.000 personas a lo largo de todo su recorrido, tanto en su traslado por el campo como por las calles de la villa hasta la plaza de toros, según informó la Policía Local de la villa.

Las reses de la ganadería salmantina de Adelaida Rodríguez, de encaste Lisardo Sánchez, salieron de los corrales situados a las afueras del pueblo pasadas las 08.00 horas, de forma rápida y compacta, arropados por los más de 300 caballistas participantes en el recorrido por el campo.

Guiados siempre por los bueyes, los toros han realizado los casi seis kilómetros de recorrido por el campo siempre muy agrupados, circunstancia que ha facilitado mucho la labor a los caballistas a la hora de realizar los descansos previstos para evitar el desgaste físico.

La manada aceleró el paso en la zona del embudo, ha entrado en el casco urbano de Cuéllar a las 09.35 horas de forma rápida y agrupada, pero el resbalón de uno de los astados nada más entrar en la calle La Resina le hizo perder el grupo y separarse unos metros.

Los momentos de mayor emoción se registraron en las calles Las Parras y San Francisco, donde los toros ofrecieron bonitas carreras al mantener el grupo liderados por los bueyes.

Pasados apenas tres minutos tras su entrada en el recorrido urbano, los toros entraron en la plaza cuellarana conducidos por los bueyes, a excepción del toro rezagado que entró en el coso cinco minutos después tras detenerse en la avenida de San Francisco.

La antigüedad de los encierros cuellaranos está probada a través de los documentos que se conservan en el Archivo Histórico de la Villa de Cuéllar, siendo el más antiguo un acuerdo sinodal firmado en 1215 por el obispo Geraldo de Segovia en el que se prohibía a los clérigos su asistencia a "juegos de toros".EFE

1010614

Mostrar comentarios