'Psicomamnesia',la "locura" por el teatro de quienes sufren transtorno mental

  • "Psicomamnesia" es una propuesta artística integradora que verá la luz mañana, en el Día Internacional de la Discapacidad, cuando suba a escena la compañía Geometrance, formada en su mayoría por personas que sufren un transtorno mental grave y que les une al resto del grupo su "locura" por el teatro.

Madrid, 2 dic.- "Psicomamnesia" es una propuesta artística integradora que verá la luz mañana, en el Día Internacional de la Discapacidad, cuando suba a escena la compañía Geometrance, formada en su mayoría por personas que sufren un transtorno mental grave y que les une al resto del grupo su "locura" por el teatro.

En el ensayo general de esta obra, que se ha desarrollado hoy en el teatro del Centro cultural Moncloa de Madrid, con la presencia de las actrices Miriam Díaz Aroca y Julia Trujillo, la directora de Comunicación de la Fundación Manantial, Helena de Carlos, se ha referido a esta iniciativa con la que se pretende acercar el mundo de las artes escénicas a las personas con transtorno mental.

"El teatro es una forma de comunicación, de transmitir emociones y conectar con el público", dice la portavoz de la fundación, una entidad sin ánimo de lucro, que se dedica a trabajar con personas con esta enfermedad.

Con esta iniciativa, la fundación, según De Carlos, ha intentado, "no tanto crear un espacio terapéutico", sino uno en el que estuvieran unidas las personas con y sin transtorno por "la locura por el teatro", un objetivo en el que llevan trabajando desde hace un año los 16 integrantes de la compañía.

Ese el número de personas que conforman la compañía "Geometrance", entre técnicos, actores y músicos, y doce de ellas sufren este tipo de transtorno psiquiátrico, que les ha llevado a titular la obra de esta forma: "Psicomamnesia".

Y lo han hecho porque, según ha dicho uno de sus actores, se les "olvidan las cosas" y así con esta palabra querían resumir su "miedo a la memoria".

Un miedo, que ha intentado aliviar hoy Miriam Díaz Arioca: "No os preocupéis, el texto se nos olvida a todos", ha dicho la actriz, quien ha animado a la compañía a seguir trabajando en otros textos como el que ahora representan y que han escrito ellos mismos.

Todo ello dirigido por Inmaculada Casillas, una educadora social del centro de día de la localidad madrileña de Parla, que gestiona la Fundación Manantial, y a la que le apasiona el teatro.

Las escenas que han creado tienen que ver con la cotidianeidad del ser humano, con lo real y lo ficticio, una mezcla que han podido presenciar Aroca y Trujillo, presidenta de la Fundación Casa del Actor y amante también de la enseñanza del teatro, como lo prueba el que diera clases en una universidad madrileña durante tres años.

Se pueden ver escenas cómicas, como la de Félix, un conductor que sube al coche estresado y se encuentra con un atasco, u otras más relacionadas con el transtorno que tienen algunos de los actores, que en las tablas se preguntan si son o no normales e incluso bajan de ellas para preguntar a las personas del público sobre si ellos también se consideran de una u otra forma.

No obstante, en la obra la enfermedad mental no está muy presente, según Inmaculada, "solo", añade, en la medida en que cada uno ha querido mostrarla" porque la mayoría del teatro actual la refleja "con muchos tópicos, el loco es muy loco y siempre se destaca la agresividad".

De momento, funcionan a nivel amateur y esperan representar su obra en numerosos centros culturales, pero su idea es profesionalizarse y continuar escribiendo nuevas obras, porque, según aseguran sus organizadores, tienen material para dos o tres más a partir de las ideas que se les ha ocurrido al escribir la primera.

Por ahora, estrenan mañana dentro del evento organizado por la Fundación Manantial "Scintillae: chispas de luz en la oscuridad del caos", en la que también actuará una compañía rusa, Krug, pionera en su país de la rehabilitación social-creativa de niños y jóvenes con diferentes tipos de discapacidades.

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