Amante secreta del presidente Mitterrand revela el porqué de su "sumisión"

En la sombra durante los 33 años de su relación, la amante clandestina del expresidente francés François Mitterrand, Anne Pingeot, ha explicado la "sumisión" que la llevó a "aceptar lo inaceptable", en unas entrevistas difundidas a partir de este lunes.

Pingeot, que fue conservadora de museo y crió en secreto a la hija que tuvo con el exmandatario, Mazarine, habla "con pudor pero sin tabú" de su relación secreta con el presidente socialista, fallecido en 1996, en una serie de entrevistas a la emisora de radio France Culture.

Descendiente de uno de los seis mariscales de Francia de la Primera Guerra Mundial, y recordando el peso de la tradición en las grandes familias burguesas francesas, Pingeot afirma: "Qué habré oído, por ejemplo, sobre la visión de la mujer... que la mujer es alguien que tiene que ser sumisa, sin ninguna vida intelectual".

"Esta parte de la sumisión hizo en el fondo que aceptara lo inaceptable", señala.

En 1962, François Mitterrand estaba casado y con dos hijos cuando se conocieron. Él tenía 46 años y ella apenas 19. El político nunca se plantearía divorciarse de su esposa Danielle.

Es en 1994 cuando los franceses descubrirán la existencia de esta relación, escandalosa para algunos, al publicarse unas fotos del presidente con su hija Mazarine, nacida en 1974.

En una sorprendente decisión, Pingeot, de 73 años de edad, publicó recientemente más de 1.200 cartas de amor de su amante.

Explica que a petición del Instituto François Mitterrand decidió volver a abrir una correspondencia "empezada hace más de un siglo", en vistas de la celebración, en 2016, del centenario del nacimiento del exjefe de Estado.

Quería también que estas cartas fueran publicadas mientras ella estuviera en vida, "por temor a que no fuera hecho correctamente" más tarde.