MADRID. LA COMUNIDAD DESTINA 28 MILLONES PARA AYUDA A DOMICILIO A PERSONAS DEPENDIENTES

La Comunidad de Madrid ha aprobado la prórroga de los contratos de servicio de ayuda a domicilio dirigido a personas en situación de dependencia que residen fuera de la capital, por un importe global de 28.184.210 euros durante el próximo ejercicio.
Según informó este sábado la Comunidad de Madrid, el Gobierno regional invirtió el pasado año 1.142 millones en atención a la dependencia, un 6% más que en 2015, colocándose en los puestos de cabeza de la gestión de la dependencia a nivel nacional. En concreto, indica en una nota, es la primera región en cuanto a la atención en centros de día; la segunda en los servicios de teleasistencia, ayuda a domicilio y prestaciones vinculadas al servicio, y la tercera en atención residencial.
En Madrid capital, el servicio de ayuda a domicilio se presta a través del convenio suscrito con el Ayuntamiento de Madrid para la atención a personas en situación de dependencia, financiado íntegramente por la Comunidad de Madrid con 54 millones de euros.
La gestión se realiza a través de dos modalidades: primero, mediante servicios relacionados con la atención personal, que tienen carácter prioritario. Algunas de las medidas incluidas en este apartado son apoyo a la higiene personal y a la movilización en el hogar, la compañía para evitar situaciones de soledad y aislamiento o el acompañamiento fuera del hogar cuando resulte imprescindible para posibilitar la participación del usuario en actividades educativas, terapéuticas y sociales.
La otra modalidad es la de servicios relacionados con la atención de las necesidades domésticas o del hogar, que tienen carácter complementario y solo pueden prestarse conjuntamente con las anteriores. Entre estos servicios se incluyen la ayuda a la limpieza cotidiana de la vivienda, la preparación de alimentos y el lavado o el planchado de la ropa.
La finalidad de este servicio es mejorar las condiciones de vida de los dependientes y de sus familias, llegando a convertirse en muchos casos en una prestación indispensable, sobre todo para las personas mayores.