Maduro culpa a oposición de violencia durante protesta y amenaza a "provocadores"

El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, culpó a sus detractores de choques en los que fue agredido este jueves el líder de la bancada opositora en el Parlamento, y amenazó con encarcelar a los que llamó "provocadores".

"Condeno la violencia que hubo hoy en el centro de Caracas producto de la violencia, de la provocación de la derecha, y llamo al pueblo a no caer en provocaciones", dijo Maduro ante una multitud que marchó hasta el palacio presidencial en apoyo a los programas sociales del gobierno.

El presidente de la bancada opositora en la Asamblea legislativa, Julio Borges, fue atacado por militantes oficialistas cuando militares y policías impidieron a un grupo de diputados ingresar al órgano electoral para exigir la activación de un referendo revocatorio contra Maduro.

Borges fue golpeado con un tubo metálico y recibió puños y patadas, lo que le provocó un sangrado nasal.

El mandatario socialista -enfrentado a una ola de protestas por la profunda crisis política y económica- reiteró que la oposición quiere generar una "espiral de violencia callejera" para derrocarlo, y exhortó a sus seguidores a mantener la calma porque "Venezuela va a seguir en paz a pesar de ellos".

Pero "que nadie se equivoque, hay suficiente cupo en las cárceles para todos los provocadores de derecha y no me va a temblar el pulso para hacer cumplir la Constitución y las leyes de la República", advirtió Maduro.

La oposición presiona para que el Consejo Nacional Electoral (CNE) organice el revocatorio este año, pero el oficialismo considera que los plazos legales no lo permiten.

Si el referendo tiene lugar antes del 11 de enero de 2017, cuando se cumplen cuatro años del período presidencial, y Maduro pierde, se convocará a nuevas elecciones. Pero si se celebra después de esa fecha, y el presidente es revocado, los dos años de mandato restantes los completará el vicepresidente, designado por el jefe de Estado.