UN 30% DE LOS NIÑOS MENORES DE CINCO AÑOS TIENEN PROBLEMAS DE INSOMNIO

Un 30% de los niños menores de cinco años tienen problemas de insomnio, que provocan importantes problemas emocionales, cognitivos y de aprendizaje. Más de 300 expertos en sueño se reunirán en Santander del 20 al 22 de abril para tratar este asunto en la XXV Reunión Anual de la Sociedad Española de Sueño (SES).
Según informó la SES, en el congreso se presentará el documento ‘Consenso Nacional del Insomnio Infantil’, que ha elaborado de forma conjunta con otras cinco sociedades científicas: Asociación Española de Pediatría (AEP), Sociedad Española de Pediatría Extrahospitalaria y AP (Sepeap), Sociedad Española de Medicina de la Adolescencia (SEMA), Sociedad de Psiquiatría Infantil (SPI) y Sociedad Española de Neurología Pediátrica (Senep).
Este documento proporciona las pautas a seguir para el manejo del insomnio. La doctora María José Jurado, coordinadora del Grupo Pediátrico de la SES, explicó que “el insomnio infantil debe abordarse desde la asistencia primaria y derivarse a unidades de sueño cuando haya sospecha de que existen trastornos primarios como la apnea o el síndrome de piernas inquietas”.
ESTRATEGIAS
Esta experta destacó, además, que el principal mecanismo para prevenir y tratar el insomnio en niños y adolescentes es la terapia cognitivo-conductual. Se trata de “enseñar tanto a los niños como a los padres estrategias que ayuden a favorecer conductas adecuadas relacionadas con un buen sueño”.
Entre estas estrategias destacan los hábitos y rutinas, como mantener unos horarios regulares, evitar el exceso de luz a la hora de acostarse, mantener una actividad estimulante y estar expuesto a la luz durante el día. El establecimiento de estos hábitos es lo que se relaciona de manera más significativa con una mejor conciliación del sueño, menos despertares nocturnos y un incremento de la duración del sueño en los niños.
El documento también recuerda que aplicar estos hábitos es especialmente importante en la adolescencia, ya que en la pubertad se produce un retraso fisiológico de la liberación de la melatonina que, junto a cuestiones como una mayor autonomía, una mayor exigencia académica y un uso inadecuado de los dispositivos electrónicos, contribuye a que los adolescentes desarrollen patrones de sueño irregulares.
La doctora Jurado añadió que, “por ejemplo, la luz que emiten dispositivos como los teléfonos móviles contribuye a que se retrase aún más la liberación de la melatonina y los jóvenes se duerman más tarde”.
En este encuentro, los especialistas también abordarán los trastornos del sueño durante el embarazo, ya que una encuesta realizada por ‘The National Sleep Foundation’ indica que el 78% de las mujeres embarazadas presenta algún problema relacionado con el sueño, mientras que el 98% presenta despertares nocturnos.
Estudios recientes han demostrado, asimismo, que las alteraciones en la calidad o en la cantidad del sueño durante el embarazo no sólo empeoran la calidad de vida de la mujer embarazada, sino que, además, aumentan el riesgo de complicaciones durante el parto y en el postparto.

Mostrar comentarios