Instantes antes de asistir al acto de toma de posesión del nuevo decano de la Facultad de Derecho de la Universidad de Valladolid, Rey ha recordado que a pesar de que coloquialmente se conoce esta prueba como "reválida", no se corresponde a lo que era esta prueba tradicional, sino que se trata de una "prueba externa" encaminada a detectar el nivel de competencia de los alumnos para elaborar un plan de refuerzo y mejora de los centros, pero "sin valor académico".
Por ello, ha pedido a los padres "confianza" en la prueba, no "sobredimensionar" su sentido y "desdramatizar" acerca de su trascendencia para el alumno, el cual "está acostumbrado a realizar exámenes desde su más tierna infancia", por lo que "no es necesario un excesivo paternalismo" hacia él, tras lo que ha recordado que "no se trata de una oposición para notario".
El consejero se ha referido así a la campaña que algunas asociaciones de padres han desarrollado contra esta prueba, sobre lo cual ha advertido de que "a veces una excesiva ideología en Educación no es ideal para los intereses de los alumnos", después de lo cual ha insistido en que la reválida "no segrega" y "no limita".
Además, ha advertido de que aquellos alumnos que no acudan el día de la prueba --11 y 12 de junio para sexto de Primaria y finales de mes para tercero-- deberán hacerla en otra fecha, para después reiterar que se trata de un "derecho de los escolares" y "no una carga".
"Se trata de preguntas que buscan ver la relación entre el apoyo educativo y los resultados escolares a favor del interés de los escolares", ha concluido el consejero.
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