El lehendakari, Iñigo Urkullu, ha propuesto este sábado un pacto de país por la familia y la infancia, con una inversión de 800 millones de euros hasta el año 2020, para la puesta en marcha de políticas sociales que reduzcan los obstáculos que dificultan que las personas puedan iniciar su proyecto familiar.
Urkullu ha realizado esta propuesta durante la clausura de las jornadas sobre Paternidad Positiva que se están celebrando este sábado en el museo Artium de Vitoria, donde ha estado acompañado del consejero de Empleo y Políticas Sociales, Ángel Toña.
En su intervención, el lehendakari ha explicado que el objetivo de su gobierno es "consolidar la familia como una estructura de seguridad personal", por lo que considera "imprescindible que sea decididamente protegida". "Nuestro compromiso es reforzar las políticas sociales y enfocarlas a la familia como núcleo esencial de la convivencia", ha explicado.
En este sentido, ha indicado que el Gobierno plantea avanzar con un "Pacto de País por la Familia y la Infancia" para responder principalmente al incremento de las dificultades económicas de las familias con hijos e hijas, las crecientes dificultades para la movilidad social y la igualdad de oportunidades; así como a la persistencia de los obstáculos que dificultan que las personas puedan iniciar su proyecto familiar y tener el número de hijos e hijas deseado.
Según ha informado, el Ejecutivo vasco ha realizado un análisis "completo y riguroso" y plantea un decálogo de medidas dirigidas a "reforzar" las políticas sociales y orientarlas al ámbito familiar de tal forma que, en el horizonte 2020, se hayan destinado 800 millones de euros en políticas sociales que mejoren la situación de las familias y la infancia en Euskadi.
LAS MEDIDAS
Entre estas medidas, se encuentra el compromiso del Gobierno a facilitar recursos económicos "mínimos" a todas las familias con hijos e hijas y a la prevención de la pobreza infantil, y el objetivo de favorecer la emancipación de las personas jóvenes para facilitar los proyectos de vida autónoma.
También se pondrán en marcha políticas para favorecer que padres y madres puedan dedicar a sus hijos e hijas todo el tiempo necesario, y para favorecer la conciliación entre las responsabilidades familiares y laborales impulsando la corresponsabilización de ambos progenitores en las tareas de cuidado.
Por otro lado, se plantea el impulso de servicios de atención infantil "accesibles, asequibles y de calidad" para todas las
familias con hijos e hijas, y la puesta en marcha de programas de parentalidad positiva, de mediación familiar y de intervención socioeducativa, entre otros.
La "hoja de ruta" que ha presentado este sábado Urkullu será trabajada con todos los agentes implicados, tanto del ámbito público como privado --instituciones públicas, grupos políticos, agentes sociales y tercer sector-- con el objetivo de plantear una estrategia "de carácter interinstitucional, estable y de largo alcance, a través de un Pacto de País por las Familias y la Infancia.
EL CONTEXTO ACTUAL
El lehendakari ha destacado que la familia ha experimentado dos grandes transformaciones demográficas, ya que ha pasado de ser "extensa" a otra de dimensión "más nuclear" y se ha "diversificado y pluralizado, tanto en formas como en contenidos".
Tras afirmar que las familias tradicionales se han "democratizado", ha señalado que ha tenido como consecuencia "una mayor igualdad entre padres, hijos e hijas, entre marido y mujer", y ha subrayado que el papel de la familia "sigue siendo fundamental tanto desde el punto de vista de la socialización como desde la perspectiva del cuidado".
Urkullu ha señalado los factores por los que las familias están cambiando entre los que ha destacado el descenso de la fecundidad o el retraso de la edad de maternidad que ha relacionado con el "retardo en la inserción y consolidación laboral de la juventud, que lleva a su vez a un retraso de su independencia residencial y de la formación familiar.
También ha señalado que a las parejas de doble empleo e ingreso les resulta muy difícil conciliar el cuidado de hijas e hijos con el trabajo y ha afirmado que la natalidad crece si es la mujer la que ostenta un empleo de calidad y cualificado. "La dificultad de conciliar trabajo y educación es el principal motivo por el que las personas menores de 30 años no tienen descendencia", ha indicado.
La jornada de este sábado en Vitoria es la continuación de los actos celebrados los días 17 y 18 en Bilbao y San Sebastián, respectivamente, con el objetivo de analizar la relación de los hombres con la corresponsabilidad, los cuidados y la igualdad, analizando las ventajas que suponen, los cambios que se están produciendo, así como las estrategias y propuestas para apoyar el cambio en los hombres hacia prácticas y actitudes más corresponsables y satisfactorias.
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