A Sanidad le sobran 10 millones de vacunas contra la gripe A

Las estimaciones se hicieron por todo lo alto: se reservaron 37 millones de vacunas contra la gripe A, sólo se compraron 13 millones (lo mínimo según la cláusula del contrato), y finalmente se han usado 3. Es decir, 10 millones de dosis se mantienen a la espera de que se decida qué hacer con ellas.

Sanidad desembolsó 94 millones de euros por los 13 millones de vacunas que adquirió a las compañías Novartis y GlaxoSmithKline (GKS). De ese montante, más de la mitad, 73 millones de euros, se han gastado en unos antivirales que aún no han sido utilizadas y que previsiblemente, al menos en este año, no lo serán.

"Es probable que ya no se vacune mucha más gente", afirman desde el ministerio aunque todavía no se ha concretado una fecha para cerrar la campaña de vacunación debido a que "se trata de un virus que ha circulado en épocas que no son habituales para la gripe".

España prevé utilizar tres millones de dosis, de esos diez que han sobrado, como reserva estratégica "en caso de que a lo largo del año se produzca un nuevo repunte de la pandemia".

El destino del resto de vacunas, siete millones (valoradas en 50 millones de euros), es incierto. Sanidad tiene sobre la mesa tres alternativas.

Por una parte se plantea revenderlas a países de la UE sin acuerdo con los laboratorios, como Polonia o Bulgaria. Eso sí, con esta fórmula el ministerio no recuperaría todo el dinero gastado, ya que esas vacunas se venderían a un precio inferior al pagado a los fabricantes debido a que la acción se englobaría dentro del marco de una iniciativa de solidaridad con estos países europeos.

Otra posibilidad barajada por el ministerio sería donar las dosis a países en vías de desarrollo, tal y como propuso el presidente de Estados Unidos, Barack Obama.

La última opción sería guardar las vacunas para el próximo año con el fin de combatir la gripe estacional ya que por lo general el virus del año siguiente es el que ha predominado el año anterior, que en este caso ha sido el del H1N1. Esta alternativa es la que ha tomado más peso, aunque todavía la OMS tendrá que confirmar que la vacuna necesaria para el próximo año sea la de gripe A.

Gripe estacional frente a gripe pandémica

Sin duda, el virus de la gripe A ha sido el de las cifras al alza. En un principio se estimaba que la pandemia podría causar tantos muertos como los de la gripe estacional, es decir unas 8.000 personas. Sin embargo, según los datos del Ministerio de Sanidad a 30 de diciembre de 2009, en España han fallecido 271 personas relacionadas con el virus. Asimismo, más de 1.200.000 de personas fueron tratadas en los centros sanitarios hasta finales del año pasado.

Estos son los últimos datos que facilita el Ministerio de Sanidad, ya que en las últimas semanas del año pasado se "detectó un descenso acusado y continuado en los casos estimados de gripe pandémica AH1N1", por lo que, según se recoge en su último informe semanal, "el Ministerio de Sanidad y Política Social considera innecesario continuar dando información periódica semanal sobre la evolución de la gripe, pues las estimaciones han dejado de ser significativas en estos momentos".

Por otra parte, según los últimos datos facilitados por la Organización Mundial de la Salud, al menos 14.000 personas han muerto ya en todo el mundo a causa de la gripe A. Según este informe, esta pandemia sigue expandiéndose en el Norte de África, Sur de Asia y algunos países de Europa.

Así, destaca que la gripe estacional ha sido ampliamente desplazada este invierno por la gripe pandémica en el hemisferio norte y se ha convertido en el virus de la gripe que más circula en Europa.

Estos datos, entre otros, serán analizados hoy en el balance sobre la pandemia de gripe A y la efectividad del Plan de Contingencia del Ministerio de Sanidad que realiza la Sociedad Española de Medicina Intensiva, Crítica y Unidades Coronarias.

Incidencias en las autonomías

Según datos del Sistema de Vigilancia de la Gripe en España, ofrecidos la semana pasada, el nivel de difusión de la gripe A ha sido nulo en la segunda semana de enero en cinco autonomías -Cantabria, La Rioja, Aragón, Baleares y Comunidad Valenciana-, y esporádico en el resto de España.

Este nivel supone que no ha habido casos de gripe A confirmados en los laboratorios ni evidencia de actividad gripal viral en los centros que forman parte de este sistema, explican fuentes de la Red Nacional de Vigilancia Epidemiológica del Instituto de Salud Carlos III.

Asimismo, en España se ha observado una disminución significativa en la tasa de incidencia de gripe en el grupo de 0-4 años, seguida por la del grupo de mayores de 5-14 años.