Abren diligencias en Alemania por agresión sexual a un cura destinado en EEUU

  • Berlín.- La Fiscalía de Darmstadt (centro de Alemania) abrió hoy diligencias contra un sacerdote alemán, destinado en los últimos años a Estados Unidos, por un delito de agresión sexual, informó un portavoz, que no precisó más detalles.

El Papa reitera a las víctimas las medidas de la Iglesia contra los pederastas
El Papa reitera a las víctimas las medidas de la Iglesia contra los pederastas

Berlín.- La Fiscalía de Darmstadt (centro de Alemania) abrió hoy diligencias contra un sacerdote alemán, destinado en los últimos años a Estados Unidos, por un delito de agresión sexual, informó un portavoz, que no precisó más detalles.

El caso se hizo público ayer después de que Conferencia Episcopal Alemana comunicara que existen sospechas de que ese religioso abusó sexualmente de "adolescentes de sexo femenino y de mujeres jóvenes" en la década de los ochenta y los noventa.

En un comunicado, la conferencia episcopal apuntó que ya se ha relevado al religioso de sus funciones y se le ha pedido que regrese a Alemania.

La institución señala, no obstante, que no existen pruebas de que el religioso abusara de niños menores de 14 años.

El Instituto Schönstatt de los Padres Diocesanos, dependiente del obispado de Maguncia, en el que trabajó el sacerdote conocía las sospechas de pederastia al menos desde 2004, en que una de las víctimas se dirigió a la entidad solicitando ayuda, continúa el comunicado de la conferencia episcopal.

Según esa institución católica el rector general del instituto acudió entonces a la diócesis de Maguncia y, tras informar de una relación ilícita del religioso con una mujer, solicitó que se diera una "nueva orientación" a la vocación de éste, enviándolo al extranjero.

El pasado 30 de marzo, la dirección del instituto transmitió las sospechas a la diócesis, que pasó a informar a la Fiscalía de Darmstadt y a relevar al sacerdote de su cargo.

El caso de ese religioso se suma al escándalo por pederastia en instituciones católicas que se desató el pasado enero en Alemania con las revelaciones de prácticas masivas en la escuela de élite jesuita Canisius, en Berlín, a lo que siguió un goteo de otros casos en prácticamente las 27 diócesis germanas.

En la mayoría de los casos se trata de abusos sexuales, pero también de malos tratos y violencia física, ocurridos en la década de los años 70 y 80, por lo que son de difícil persecución judicial.

El Estado y la Iglesia en Alemania acordaron la semana pasada cooperar estrechamente en el esclarecimiento de los casos de pederastia en instituciones católicas, si bien mantienen diferencias en cuanto a la obligatoriedad de denunciar todo caso de abuso sexual.

Si bien los obispos quieren reformar sus directrices internas, según las cuales sólo hay que denunciar casos no prescritos y de fundada sospecha, se resisten a informar a las fiscalías en el caso de que la víctima haga constar expresamente que no lo desea, lo que sí exige el Ministerio de Justicia.

Mostrar comentarios