Académicos defienden una financiación con más poder autonómico pero sin distinción foral

Lo han explicado en una mesa sobre 'El reto de la financiación autonómica' en el XXI Encuentro de Economía de S'Agaró (Girona), que ha sido moderada por el director de la Fundación de Estudios de Economía Aplicada (Fedea), Ángel de la Fuente.

La profesora de Hacienda Pública de la Universitat de Barcelona (UB) Maite Vilalta ha afirmado que las posibilidades técnicas para el modelo de financiación autonómica "pueden ser infinitas, pero quienes deben llegar a consensos son los políticos", y ha augurado que la probabilidad de uno u otro escenario dependerá de los acontecimientos que se sucedan en los próximos meses.

Ha hablado de cinco escenarios posibles según el posicionamiento de Catalunya: podría reclamar cambios en el sistema común; una negociación bilateral sin salir del modelo general, por ejemplo en el reparto de la cesta tributaria; una negociación bilateral de un modelo similar al foral, retomando la propuesta de pacto fiscal; no reformar el modelo, esperando a la reforma federal de la Constitución a medio plazo, y una declaración de independencia de Catalunya.

En cualquier caso, Vilalta ha considerado que es necesario un nuevo modelo de financiación "para seguir avanzando", porque la autonomía financiera de las autonomías es insuficiente, el mecanismo de nivelación es mejorable, y no hay equidad por la separación entre las autonomías del régimen general y del foral, a lo que ha añadido que en el modelo actual no se ha cumplido lo pactado.

REPARTO DE LOS TRIBUTOS

El profesor de la Universidad de Málaga Joaquín Orioles ha lamentado que, con el sistema de financiación autonómica actual, "cada cuatro o cinco años se desmonta y hay que volver a construirlo", y ha apostado por pensar un modelo estable indefinido, troceando el sistema fiscal, no el rendimiento, sino la propiedad de los tributos, repartiéndola entre las administraciones.

Según su propuesta, para el Estado serían los impuestos de mayor potencia redistributiva, para las autonomías los que gravan el consumo, y para las administraciones locales los de actividades de proximidad y bienes inmuebles.

El catedrático de Economía Pública de la Universidad de Zaragoza Julio Gómez Laborda se ha mostrado partidario de encontrar "un punto de encuentro a mitad de camino" entre el modelo general y foral, con descentralización fiscal que incluya un reparto equitativo entre todos los niveles de administración según el gasto al que deben hacer frente por su nivel de competencias.