El arzobispo de Santiago insta a no "pasar de lejos de situaciones injustas" y a oponerse a "violencias y desigualdades"

EUROPA PRESS
EUROPA PRESS

Durante su Homilía en respuesta a la ofrenda de Traslación del Apóstol Santiago, realizada por el presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, monseñor Barrio ha apelado a la conciencia y al papel del cristiano para "afrontar tantas violencias estériles y desigualdades degradadoras" en la sociedad actual.

"En nuestra cultura es necesario valorar el sacrificio, la solidaridad y la entrega a los demás", ha dicho Julián Barrio, que ha criticado que los ciudadanos actuales, "ensimismados en sí mismos", cierren "las puertas del corazón, sin oír que están llamando a ellas" y "pensando que preocuparse de los demás es perder el tiempo".

"Nuestro individualismo nos lleva a fomentar la comodidad, la indiferencia y la insolidaridad, resignándonos a la visión fatalista de las cosas", ha dicho el arzobispo en la Homilía, al tiempo que ha subrayado que nadie "puede llamarse cristinano" y "pasa de lejos sobre situaciones injustas que generan marginación y abandono". "Nuestra misión no es la de ausentarnos del mundo, sino la de transformarlo", ha apostillado.

Del mismo modo, ha pedido a los creyentes que "no marginen a Dios" del "horizonte de la realidad social, cultural, política y económica de la existencia" humana y ha urgido a "sanar las heridas físicas y espirituales de tantas víctimas", abriendo los brazos a "los que sufren complejas experiencias en el ámbito familiar, social y religioso".

Para concluir, ha pedido la intercesión del Apóstol por las personas y familias "necesitadas espiritualmente y materialmente", por "los que forman los distintos pueblos de España" y por los cristianos "perseguidos por el fortalecimiento" de la vida creyente, así como por la "protección de los padres de familia".

Mostrar comentarios