Brown se declara "horrorizado" por la ejecución de un británico en China

Londres.- El primer ministro del Reino Unido, Gordon Brown, se declaró hoy "horrorizado" por la ejecución en China del ciudadano británico Akmal Shaikh, condenado a muerte en 2008 tras ser detenido en posesión de cuatro kilos de heroína.

"Condeno la ejecución de Akmal Shaikh en los términos más rotundos", afirmó Brown en un comunicado, después de que el reo, ejecutado hoy a las 02.30 GMT, se convirtiera en el primer europeo al que se aplica la pena capital en casi sesenta años en China.

"Me siento horrorizado y decepcionado por no haberse atendido nuestra persistente petición de clemencia", subrayó el jefe del Gobierno británico.

Los familiares del reo, el Gobierno británico, la ONG Reprieve y la ONU habían pedido a China indulgencia, argumentando que Shaikh, de 53 años, sufría trastorno bipolar, pero la Justicia china defendió que las pruebas médicas no mostraron ningún problema psicológico.

Sin embargo, Brown confesó sentirse "particularmente preocupado porque no se efectuó ninguna evaluación de salud mental".

"En estos momentos, nuestros pensamientos están con la familia y amigos del señor Shaikh, y les envío nuestra más sincera condolencia", añadió el primer ministro.

El ministro británico de Exteriores, David Miliband, también condenó la ejecución al recalcar que "el Reino Unido se opone completamente al uso de la pena de muerte en todas las circunstancias".

En un comunicado emitido por la ONG de asistencia legal Reprieve, la familia del difunto expresó su "dolor por la decisión china de no mostrar clemencia", y agradeció el apoyo recibido para salvar a Shaikh.

El reo, de religión musulmana, casado y con tres hijos, fue detenido en 2007 en posesión de la droga en el aeropuerto de Urumqi, adonde llegó procedente de Dushanbe (capital de Tayikistán).

Shaikh fue condenado a muerte un año después, ya que la ley china contempla la pena capital para todo aquel que sea detenido con más de 50 gramos de estupefacientes.

El anterior europeo ejecutado en China fue el italiano Antonio Riva, legendario piloto militar en la I Guerra Mundial, quien fue ajusticiado en Pekín en 1951 acusado de haber urdido un complot para asesinar al máximo líder chino, Mao Zedong.

De acuerdo con la organización defensora de los derechos humanos Amnistía Internacional (AI), un total de 1.718 personas fueron ejecutadas en China en 2008.

Según Steve Ballinger, portavoz de AI, "China es responsable del 72 por ciento de las ejecuciones en el mundo, y China ejecuta, de lejos, mucho más que cualquier otro país".