Bruselas propone vetar la pesca procedente de Belice, Camboya y Guinea

Bruselas, 26 nov.- La Comisión Europea (CE) propuso hoy prohibir la importación de productos pesqueros de Belice, Camboya y Guinea y suspender la pesca por parte de barcos europeos en sus aguas en respuesta a la falta de cooperación de estos países en la lucha contra las capturas ilegales.

La medida, la primera de este tipo y que ahora debe recibir el visto bueno de los ministros de los Veintiocho, llega después de que el pasado año Bruselas advirtiese ya a estos y otros países.

Mientras que Fiyi, Panamá, Sri Lanka, Togo y Vanuatu -también amonestados hace un año- "han registrado auténticos avances", Belice, Camboya y Guinea "no han logrado progresos creíbles" a la hora de cumplir con las normas internacionales de pesca, explicó el Ejecutivo comunitario.

La comisaria europea de Pesca, Maria Damanaki, indicó que la propuesta incluye un veto a la importación de capturas hechas por barcos con bandera de los tres países en cuestión, pero también prohíbe a la flota europea faenar en sus aguas e impide cualquier acuerdo europeo de pesca con ellos.

"La decisión se ajusta al compromiso internacional de la UE de garantizar la explotación sostenible de los recursos de la pesca, tanto dentro como fuera de su territorio", señaló la CE.

En paralelo, la Comisión advirtió hoy de forma oficial a Corea del Sur, Ghana y Curazao, al considerar que no cumplen con sus obligaciones internacionales en materia de lucha contra la pesca ilegal.

"La Comisión ha detectado una serie de fallos concretos tales como la falta de medidas para hacer frente a las deficiencias en materia de seguimiento, control y vigilancia de la pesca, y sugiere la adopción de medidas correctoras para subsanarlas", indicó.

Por ahora, esas "tarjetas amarillas" no suponen ninguna medida comercial, sino que la UE buscará una colaboración intensificada con estos países para tratar de resolver los problemas detectados.

"Estas decisiones ponen de manifiesto nuestro firme compromiso en materia de lucha contra la pesca ilegal que perjudica tanto al mercado de la UE como a los pescadores locales y comunitarios. Seguimos presionando a los países que alimentan la cadena de abastecimiento de productos de la pesca ilegal, en cuanto Estado ribereño, Estado de abanderamiento o pabellón de conveniencia", indicó Damanaki.

La comisaria señaló que el "África occidental ha sido identificada como una de las principales fuentes de pesca ilegal", pero subrayó que "intención es aplicar el mismo planteamiento riguroso en el Pacífico".

Para Damanaki, la propuesta de prohibir las importaciones de Belice, Camboya y Guinea enviará un "mensaje político a otros países" para que tomen medidas.

La organización ecologista Greenpeace expresó su satisfacción por la decisión de Bruselas y consideró que servirá de "motivación" para que el resto de Estados advertidos mejoren la gestión de su pesca y "ayuden a crear un futuro mejor para sus mares y pescadores", señaló en un comunicado.

Greenpeace celebra que la UE, uno de los principales mercados consumidores de pescado, use su fuerza como comprador para forzar mejoras en la pesca a escala global.