Asunción, 29 sep.- Las autoridades paraguayas y brasileñas suspendieron hoy las tareas de búsqueda de los tres desaparecidos que viajaban en el barco hundido en el río Paraguay el pasado miércoles con 26 personas abordo, tras hallar a once de los ocupantes muertos, informó a Efe una fuente policial.
Los buzos que trataban de sacar el barco a la superficie cesaron las inmersiones este lunes debido a la fuerte corriente y la posición de la embarcación, dijo a Efe el comisario de Carmelo Peralta, Alto Paraguay, Manuel Morel, donde ocurrió el suceso, a unos 600 kilómetros al norte de Asunción.
Las autoridades estiman que los tres desaparecidos, el capitán del barco, de nacionalidad paraguaya, y dos turistas brasileños, quedaron atrapados dentro y habrían fallecido, dijo Morel.
Nueve de los cuerpos sin vida encontrados eran turistas brasileños y dos paraguayos, según la Policía.
La embarcación Hotel Sueño del Pantanal, que se hundió cerca de la localidad brasileña de Porto Murtinho, cercana a la paraguaya de Carmelo Peralta, está a unos 20 metros de profundidad y los buzos consideran demasiado arriesgado seguir sumergiéndose en la zona debido a la posición del barco.
"No tuvimos resultados positivos. Los buzos dejaron de entrar en el agua porque el barco se volcó, el casco está hacia arriba y las casillas hacia abajo. Está en constante movimiento y corren riesgo sus vidas, por eso ya no están buceando", explicó Morel.
El comisario explicó que en cuanto el barco se posicione de forma adecuada podrán volver a bucear y llevarlo hacia la orilla.
Doce personas fueron rescatadas con vida, siete de ellas tripulantes, todas de nacionalidad paraguaya, mientras que las otras cinco son turistas brasileños.
La embarcación, que ofrecía servicios turísticos para practicar la pesca, volcó a causa de una tempestad que provocó vientos de hasta 93 kilómetros por hora.
El pasado martes un barco de entrenamiento de la Armada boliviana naufragó también en la hidrovía Paraguay-Paraná y al menos dos personas murieron.
Los cuerpos sin vida de la periodista de televisión Liliam Ortega Soto y del subrigadier Jesús Rubén Quispe Churata fueron hallados sin vida cerca de Fuerte Coimbra, en Brasil.
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