cáncer páncreas

El pasado 7 de febrero de 2014 Pedro Zerolo anunció que padecía cáncer de páncreas. El edil del PSOE informó mediante un comunicado que, tras una revisión médica, le habían detectado una enfermedad que tiene una tasa de supervivencia general es menor de 6%. Ante la adversidad, el secretario de Movimientos Sociales del PSM-PSOE, le puso una sonrisa a la mala noticia prometiendo "luchar hasta el final" contra el cáncer.

Pero, ¿qué y por qué es tan cruel el cáncer de páncreas? Es una enfermedad en la que se forman células malignas en los tejidos de páncreas, que es una glándula de aproximadamente seis pulgadas de largo con forma de pera delgada descansando de costado. Las razones de su alto nivel de mortalidad se deben a su pronta difusión, su falta de síntomas específicos tempranos y su diagnóstico tardío. En el momento del diagnóstico, los pacientes con cáncer pancreático por lo general tienen la enfermedad localmente avanzada e incluso metástasis.

Esta enfermedad es tan difícil de detectar porque:No hay signos ni síntomas notables en los estadios iniciales del cáncer de páncreas.Los signos y síntomas del cáncer de páncreas, cuando se presentan, son similares a los signos y síntomas de muchas otras enfermedades.El páncreas está oculto detrás de otros órganos como el estómago, el intestino delgado, el hígado, la vesícula biliar, el bazo y los conductos biliares.

¿Cuáles son los posibles síntomas? Es posible que el cáncer de páncreas no cause los primeros signos o síntomas como color oscuro en la orina, dolor en la parte superior o media del abdomen y la espalda, pérdida de peso sin razón conocida, pérdida de apetito o sensación de mucho cansancio. Los médicos aseguran como principales factores de riesgo el haber tenido antecedentes familiares, fumar, la obesidad y la pancreatitis crónica.

Según estudios realizados en Estados Unidos en 2015 sobre la enfermedad, se calculó que se dieron 48.960 casos nuevos y un total de 40.560 defunciones. Esta enfermedad ha tenido un incremento significativo durante las últimas décadas y se encuentra en cuarto lugar entre las principales causas de muerte por cáncer en los Estados Unidos.