Condenan a una médica tras no enviar al cardiólogo a un hombre que murió

  • El Juzgado de lo Penal número 3 de Valladolid ha condenado a una médica del Hospital Campo Grande de la capital vallisoletana a un año de cárcel y tres de inhabilitación profesional, ya que no dirigió al cardiólogo a un paciente al que debió derivar a este especialista, tras lo que el enfermo murió.

Valladolid, 11 oct.- El Juzgado de lo Penal número 3 de Valladolid ha condenado a una médica del Hospital Campo Grande de la capital vallisoletana a un año de cárcel y tres de inhabilitación profesional, ya que no dirigió al cardiólogo a un paciente al que debió derivar a este especialista, tras lo que el enfermo murió.

La sentencia, facilitada hoy por el Defensor del Paciente, impone la condena por un delito de homicidio por imprudencia grave profesional, por hechos ocurridos en 2009, a raíz de que el paciente, A.P.P., de 56 años, acudiese a un centro sanitario el 24 de febrero por que había sufrido tres episodios de dolor retroesternal opresivo en las últimas veinticuatro horas.

Desde el Servicio de Urgencias del Hospital Sagrado Corazón de Valladolid, al que se había dirigido el paciente, le derivaron al Hospital Campo Grande para que le examinara un cardiólogo, ya que presentaba factores de riesgo (su edad, hipercolesterolemia y sobrepeso).

Fue sobre las 13.00 horas el mismo día cuando la acusada, M.S.A.M., médico de familia, atendió al paciente, al que efectuó varias pruebas, incluida una radiografía de tórax, "pero no apreció en la misma la cardiomegalia que presentaba el paciente, consistente en una hipertrofia del ventrículo izquierdo", explica la sentencia.

"Tampoco hizo ecocardiograma para descartar que el bloqueo de la rama derecha del haz de His se debiera a alguna cardiopatía ni acordó la realización de una seriación enzimática", argumenta.

Explica el texto judicial que la médica concluyó que el diagnóstico era "dolor torácico atípico por cardiopatía isquémica" y no consideró necesario avisar al cardiólogo, "limitándose" a indicar en el informe que el paciente pidiera cita con cardiología para valoración, sin apuntar que hubiera necesidad de conseguirla en un plazo breve.

Tras el diagnóstico, el enfermo volvió a su vida habitual "en lugar de haber sido evaluado por un especialista en cardiología que, a través de las pruebas antes referidas y de otras posibles (por ejemplo una prueba de esfuerzo) habría descubierto" que el paciente sufría una isquemia miocárdica crónica y estenosis coronarias arterioscleróticas.

Considera el juez en la sentencia que "podría haberle tratado médicamente con fármacos e incluso mediante una intervención quirúrgica para evitar la producción de una trombosis aguda coronaria".

"Como consecuencia de la explicada falta de atención médica se agravó la crisis isquémica iniciada" y el paciente falleció sobre las 3.00 horas del 1 de marzo en San Pedro del Pinatar (Murcia), a donde había bajado el 26 de febrero, señala el texto judicial.

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