Managua, 14 ago.- El Centro Nicaragüense de Derechos Humanos (Cenidh) denunció hoy ante la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), en Washington, supuestas violaciones de garantías del debido proceso a los acusados de los ataques armados contra sandinistas, que dejaron 5 muertos y 19 heridos en julio.
"El Cenidh está participando en el 152 período de audiencia de la CIDH y uno de los hechos que hemos denunciado es la violación de toda las garantías del debido proceso respecto las personas que están siendo acusadas como autores de la masacre del 19 de julio", dijo el director del Cenidh, Mauro Ampie, a los periodistas.
Entre las denuncias interpuestas por el Cenidh están los allanamientos de moradas sin órdenes judiciales, la detención prolongada por más tiempo del que manda la ley, la incomunicación en que los mantienen y el que se les haya impedido reunirse en privado con sus abogados defensores.
Pobladores de la zona norte de Nicaragua denunciaron que sus familiares presos continúan en aislamiento y otros están siendo perseguidos por las autoridades del Gobierno, de acuerdo con el magistrado de Apelaciones, Roberto Petray.
La jefa de la Policía nicaragüense, Aminta Granera, no despejó los rumores a cerca del acusado Pablo Martínez Ruiz, quien se encuentra prófugo y de quien se dice que habría fallecido en un intercambio de disparos con el Ejército de Nicaragua.
"Estamos trabajando, no podemos dar información hasta que nosotros tengamos finalizada la investigación", matizó Granera, en una rueda de prensa improvisada en un campo de softbol.
La jefa policial dio una respuesta similar sobre las preguntas que no fueron respondidas este jueves en la presentación de ocho acusados por la matanza del 19 de julio, entre ellas, los motivos de la emboscada.
"Yo creo que fui clara, si no entendieron, el que no quiere entender no entiende", contestó.
La presidenta de la Corte Suprema de Justicia (CSJ), Alba Luz Ramos, confirmó que el repentino traslado del juicio desde la provincia de Matagalpa hacia Managua, el lunes pasado, se debió a razones de territorio, al considerar que "los hechos principales" (la planificación de la emboscada) ocurrieron en la capital.
Un total de 13 hombres, entre ellos dos prófugos, están acusados de los delitos de conspiración, proposición para la ejecución de delitos de crimen organizado en concurso real de asesinato y lesiones gravísimas.
Los hechos ocurrieron la noche del 19 de julio pasado, cuando los sandinistas regresaban en caravana de celebrar en Managua el 35 aniversario de la revolución que derrocó al dictador Anastasio Somoza Debayle en 1979.
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