Detenido un hombre que enviaba fotos pornográficas a menores por Whatsapp

    • El hombre está acusado de llevar a cabo estas prácticas con, al menos, 13 menores de distintas partes de España.
    • El autor obtuvo los teléfonos móviles de los menores a través de lasredes sociales, donde los jóvenes suelen colocar información personal como su número de teléfono.
La Guardia Civil asesta un golpe a nuevas vías de pornografía infantil, con 26 detenidos
La Guardia Civil asesta un golpe a nuevas vías de pornografía infantil, con 26 detenidos

La Guardia Civil ha detenido en Córdoba a un hombre de 37 años que mantenía contacto con chicas menores a través de Whatsapp y a las que enviaba imágenes pornográficas a través de esta aplicación.

Según informó hoy el Instituto Armado mediante un comunicado, el hombre está acusado de llevar a cabo estas prácticas con, al menos, 13 menores de distintas partes de España.

La investigación comenzó en verano de 2014, a raíz de una denuncia en la isla de Tenerife de un padre cuya hija de 11 años estaba recibiendo imágenes pornográficas explícitas por Whatsapp desde un número desconocido.

Los agentes localizaron al titular y usuario del teléfono, que residía en Córdoba. Tras su detención se intervinieron dos teléfonos móviles, en los que estaban las fotografías que había recibido la menor de Tenerife.

En los teléfonos del investigado también se hallaron gran cantidad de mensajes con contenido pornográfico. Al analizar las conversaciones, se llegó a la conclusión de que en 16 de los casos el interlocutor podría ser menor de edad. Los agentes procedieron a identificar a los titulares de los teléfonos y se determinó que ,entre los destinatarios de los chats de contenido pornográfico, había 12 menores.Perfil inventado

El autor obtuvo los teléfonos móviles de los menores a través de las redes sociales, donde los jóvenes suelen colocar información personal como su número de teléfono.

El detenido simulaba ser un joven de entre 16 y 25 años de edad. Enviaba fotografías de un joven que no era él para así lograr un acercamiento inmediato con su potencial víctima. Pese a que los menores atacados comunicaban su minoría de edad, el autor no tenía reparo en usar con ellos frases con connotaciones pornográficas y en enviarles imágenes de sexo explícito.

Los investigadores de la Guardia Civil denominan esta conducta como "grooming". Se trata de adultos que establecen relaciones con menores donde, en principio, se intenta ganar su confianza y progresivamente van intercambiando material pornográfico, o se le pide su participación en actos de naturaleza sexual llegando incluso a forzar encuentros personales.

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