Discapacidad. Familiares reflexionan sobre los roles de las mujeres con discapacidad intelectual

Familiares de personas con discapacidad intelectual debatieron este martes en Madrid sobre los roles que se atribuyen a las mujeres con este tipo de discapacidad y sobre los que realmente asumen.
El encuentro, denominado 'Más que una hija', está convocado por la Federación de Organizaciones a favor de Personas con Discapacidad Intelectual de Madrid (Feaps Madrid) y cuenta con la colaboración del Área de Gobierno de Asuntos Sociales del Ayuntamiento de Madrid y de la Fundación ONCE.
En su inauguración, Miguel Sagarra, director de Empresas Participadas del Grupo Fundosa, de Fundación ONCE, transmitió su reconocimiento y el de la institución a la que representa a las madres con discapacidad intelectual, "luchadoras, comprometidas y pendientes de todos los detalles" de sus familias, pero hasta ahora, con poca aceptación social.
Por su parte, Beatriz Navarro, vicepresidenta de Feaps Madrid, hizo hincapié en la necesidad de que la sociedad entienda que las mujeres con discapacidad "son y deben ser las mejores portavoces de sí mismas", como han venido demostrando en los últimos tiempos con su acción, que tanto ha contribuido a mejorar su visibilidad en todos los ámbitos de la vida.
Desde esta perspectiva, el objetivo de la jornada, que se celebra en el marco del Día Internacional de las Mujeres (el 8 de marzo), es llamar la atención de los familiares sobre la realidad de la mujer con discapacidad intelectual y contribuir así a su visibilidad y a la reducción de las situaciones de desventaja a las que se enfrenta.
Para dar a conocer algunas de estas situaciones de desventajas, el encuentro contó con la proyección de 'También somos mujeres', un documental protagonizado por mujeres con discapacidad intelectual que reivindican el derecho de este colectivo a formar parte de la sociedad y a tomar sus propias decisiones.
"Somos, estamos, contamos", dicen las mujeres del audiovisual, que cuenta, entre otras, la historia de Noelia, una mujer que se enfrentó a su maternidad sin la ayuda de una pareja y que demostró a quienes la rodeaban, escépticos, que su hija puede vivir en un ambiente normalizado y feliz.
Además de la maternidad, el documental se hace eco de la importancia del trabajo para las mujeres con discapacidad intelectual, que hasta en un 70% de los casos son inactivas laboralmente, y de las ayudas que precisan para tener una vida mejor, todavía escasas, según el testimonio de algunos familiares.