Discapacidad. Piden medidas de acción positiva y aumento de ayudas para promover la movilidad de universitarios con discapacidad


Fundación ONCE presentó este jueves una guía que aborda la movilidad transnacional de los estudiantes universitarios con discapacidad. Entre otras propuestas el documento recoge la necesidad de implantar medidas de acción positiva en las convocatorias de becas y aumentar la cuantía de las ayudas para este colectivo.
La presentación del informe, que tuvo lugar en la sede de Servimedia, contó con la participación de Juan Antonio Moriano, director de Unidis (Unidad de Discapacidad de la UNED) y representante de la Red Universitaria de Asuntos Estudiantiles (Runae) de la CRUE; Dorothy Kelly, presidenta del grupo de trabajo de movilidad de la Comisión de Internacionalización y Cooperación de las Universidades Españolas (Cicue); Pilar Villarino, directora ejecutiva del Comité Español de Representantes de Personas con Discapacidad (Cermi), e Isabel Martínez, comisionada para Universidad, Juventud y Planes Especiales de Fundación ONCE.
Para la elaboración del informe se han tenido en cuenta los diferentes estudios realizados sobre movilidad y, tras su análisis, se propone implantar medidas de acción positiva en las convocatorias de becas y ayudas para la movilidad para estudiantes con discapacidad en los programas de Grado, Posgrado, Prácticas, Investigación, Cursos y Lectorados.
En concreto, recomienda la reserva de plazas para el alumnado con discapacidad o una mayor puntuación en la adjudicación de las becas y ayudas, con el fin de garantizar la igualdad de oportunidades en el acceso a los programas de movilidad e impulsar la participación de estudiantes y titulados con discapacidad.
También incluye la necesidad de aumentar la cuantía de las ayudas a la movilidad en el caso de que el estudiante o titulado tenga una discapacidad, debido al sobrecoste que supone la utilización de recursos complementarios.
“El objetivo es que cada vez más universitarios con discapacidad participen en estos programas de movilidad”, subrayó Martínez. Según explicó, hay muy pocas convocatorias que tengan una disposición específica que atienda la discapacidad. El resultado que recoge el informe es que sólo el 0,1% de los estudiantes matriculados en las universidades españolas acceden a un programa de movilidad. “Son 21 alumnos de los más de 200.000 que participan en el programa Erasmus”, lamentó.
Fomento y promoción, por parte de las universidades, del acceso de sus estudiantes y titulados con discapacidad a programas de movilidad mediante una debida información y orientación sobre los mismos, y mayor coordinación de todos los agentes implicados en la movilidad de un estudiante con discapacidad (tutores académicos, ORI, SAED de las universidades de origen y destino), son otras de las propuestas que recoge la guía.
Para Moriano, director de Unidis, el informe es una herramienta muy útil que permite conocer en qué momento nos encontramos. “Los datos reflejan que estamos en el fondo y que tenernos que ir a más”. “Para ello”, añadió, “es importante que haya acciones positivas, mayor financiación pero también mayor concienciación por parte de la sociedad, los profesores y los propios estudiantes de que ellos pueden y deben salir fuera y vivir esa experiencia. Hay que dejar atrás el proteccionismo y salir de la zona de confort”, aseveró.
En la misma línea, Villarino insistió en la necesidad de concienciar a los propios estudiantes con discapacidad, lo que le facilitará poder acceder a un empleo de calidad y lograr la autonomía. Además, también se logra visibilizar la discapacidad y mostrar las buenas prácticas que se realizan en España en materia de inclusión de la discapacidad.
RED EUROPEA DE UNIVERSIDADES INCLUSIVAS
El informe reclama la creación de una Red Europea de Universidades Inclusivas promovida por la Comisión Europea, con el fin de conocer el grado de accesibilidad y los servicios ofertados por cada universidad para los estudiantes con discapacidad.
También la elaboración de un mapa de buenas prácticas y programas exitosos en la atención a estudiantes con discapacidad en las universidades europeas sobre materias concretas (prácticas, empleo, orientación, etc.).
Por último, la responsable de la Comisión de Internacionalización de las Universidades, Dorothy Kelly, destacó la oportunidad de este informe, en especial la propuesta de crear una Red Europea. En su opinión, la puesta en marcha de dicha red permitirá reunir toda la información, que las universidades se conozcan y facilitar así la incorporación de universitarios con discapacidad a la movilidad internacional. Además, serviría para compartir buenas prácticas, experiencias y problemas. Por todo ello, se comprometió a hacer llegar esta petición a la Comisión. “Hay que insistir en ello porque es una prioridad también para la Unión Europea”, concluyó.
El estudio está elaborado por Fundación ONCE en el marco del Programa Operativo del Fondo Social Europeo de Lucha contra la Discriminación.

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