Dueño de avioneta siniestrada, conmocionado tras regreso urgente a Argentina

Buenos Aires, 28 may.- Federico Bonomi, el dueño de la avioneta que se precipitó este martes en el Río de la Plata y dejó cinco muertos y cuatro heridos, aseguró hoy que está "quebrado y destruido" y que el piloto, quien falleció en el accidente, era "experimentado".

Bonomi, empresario textil argentino y dueño de la marca de indumentaria Kosiuko, se encontraba de vacaciones en Estados Unidos y regresó de inmediato al conocer la noticia.

"Tomamos el primer avión ni bien nos enteramos. Vi todo por internet y lo seguí por teléfono desde Estados Unidos", explicó Bonomi en declaraciones a los medios al aterrizar en el aeropuerto internacional Ezeiza de Buenos Aires.

"No entendemos qué pasó", apuntó el empresario, quien dijo estar "quebrado, destruido", en declaraciones al canal TN.

Bonomi subrayó que el piloto Leandro Larriera, quien también murió en la tragedia, era "un piloto experimentado con entre 5.000 y 6.000 horas de vuelo".

En la avioneta viajaban ocho pasajeros, además del piloto, que habían partido del aeropuerto de la localidad argentina de San Fernando, en dirección a la ciudad uruguaya de Carmelo.

Los ocupantes eran empresarios argentinos y tenían una relación de amistad con Bonomi.

Ayer, tras conocerse la caída de la avioneta al río, Bonomi explicó que utilizaba la aeronave "para realizar viajes familiares, salvo raras excepciones".

Las víctimas fatales fueron Gustavo Fosco, un alto directivo de la empresa Renault Argentina; Fernando Sánchez, jefe de Comunicación Externa de la multinacional francesa; Fernando Lonigro, subgerente de la firma de turismo TTS Viajes; Facundo Alecha, jefe de Recursos Humanos de la compañía cervecera Quilmes, y el piloto, Leandro Larriera.

Los cuatro heridos se encuentran ingresados en hospitales de Argentina, según informan medios locales.

Se desconocen por el momento las causas del siniestro, que está siendo investigado, aunque el secretario de Seguridad argentino, Sergio Berni, opinó hoy que "la niebla jugó un papel muy importante".

Dado que el avión cayó en aguas de jurisdicción uruguaya, se ha hecho cargo del caso la jueza letrada de Primer Turno de Carmelo María Alexandra Facal.