Desde que las históricas medidas de restricción entraron en vigor en junio, California acumula un ahorro del 29,5%, por encima del 25% que impuso el gobernador demócrata Jerry Brown.
"La respuesta de los californianos a la severa sequía (...) muestra que entendieron que estamos en la peor sequía de nuestras vidas", dijo en un comunicado la directora del ente que controla el agua en California (costa este de Estaos Unidos), la State Water Resources Control Board, Felicia Marcus.
El gobierno estatal puso en marcha en los últimos meses programas para concienciar a los ciudadanos sobre el despilfarro, a pesar de las altas temperaturas que se registran cada año durante el verano boreal.
De esta forma, los 38 millones de californianos tienen prohibido regar jardines con agua potable sin un sistema de riego por goteo, mientras que las grandes superficies como campos de golf también han debido rebajar la irrigación.
Las multas por despilfarro en julio aumentaron a 15.845, frente a las 8.876 emitidas en junio, gracias a las denuncias que hicieron las compañías que gestionan el suministro de agua.
La dura situación que atraviesa esta región del oeste estadounidense desde hace cuatro años, ha afectado principalmente a la agricultura, además de agravar los incendios que habitualmente se dan en la temporada estival.
Las restricciones estarán vigentes hasta febrero de 2016.
spc/lb
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