El año 2015 sigue batiendo récords y podría ser el más caluroso de la historia

En octubre se han dado las temperaturas más altas del planeta jamás registradas.Se suman asíseis meses consecutivostraspasando el récord mundial de temperatura promedio en la superficie terrestre y oceánica."La temperatura global promedio en las superficies terrestres y océanos a octubre de 2015 fue la más altadesde que comenzó este registro en 1880", según ha indicado laAdministración Nacional Oceánica y Atmosférica(NOAA) en su reporte mensual. La ONU y la Organización Meteorológica Mundial ya ha advertido varias veces de las terribles consecuencias que ésto puede tener.

La temperatura media global estuvo 0,86 ºC por encima de la media del siglo XX, tal y como apuntan los datos recogidos. Cuatro décimas por debajo de septiembre, que fue la marca más alta de la historia y superando el récord del año pasado en 0,19 ºC. A su vez, las temperaturas terrestres fueron un 0,96 ºC más altas que el pasado siglo, y las registradas en el mar se incrementaron en 0,75ºC.

Por lo que se deduce que 2015 se encamina a ser el más caluroso desde 1880. Según la organización, entre enero y octubre se "registró un récord de calor", superando el del año pasado por 0,12 grados centígrados. Y es que"ocho de los primeros diez meses de 2015 han sido récords de calor para sus respectivos meses".

Todos estos datos están ya en manos de los dirigentes políticos que se reunirán entre el 30 de este mismo mes y el 11 de diciembre en París con motivo de la 21º Conferencia Internacional sobre Cambio Climático (Conferencia de las Partes, COP21) para intentar ponerse de acuerdo sobre el descenso de emisiones de efecto invernadero. Este encuentro está organizado por la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático (CMNUCC).

Otro de los temas clave será el impacto en los polos y es que, según la NOAA, la cobertura de hielo del Ártico fue un 9,5% más baja que la media entre 1981y 2010. Hay que tener en cuenta que los satélites comenzaron a monitorizar las fluctuaciones de masa helada en 1979. El pasado julio ha sido el octavo con menor extensión de hielo. Sin embargo, en la Antártida el hielo sigue extendiéndose, y según los datos suministrados, es un 3,8% mayor que la media de años comentada anteriormente.