El colectivo de homosexuales aplaude el primer protocolo de actuación policial ante los delitos de odio

Las principales organizaciones representantes del colectivo de homosexuales, bisexuales y transexuales en España mostraron este lunes su “satisfacción” por la creación del Primer Protocolo de Actuación Policial ante los Delitos de Odio, puesto en marcha por el Ministerio del Interior.
En declaraciones a Servimedia, la presidenta de la Federación Española de Lesbianas, Gais, Bisexuales y Transexuales (Felgbt), Boti Rodrigo, aseguró que este plan ha sido un “avance” en el terreno de la protección de las víctimas de odio, y destacó que por primera vez, se dará visibilidad a las víctimas de delitos que tienen su raíz en la “lgtbfobia”.
A su juicio, es “necesario apoyar” a estas personas, “porque todavía muchas no denuncian por vergüenza”, por lo que celebró que “por fin se ponga el foco” en estos delitos, y que se vaya a mejorar la formación de los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado en esta materia.
Para la presidenta de la Felgbt, uno de los aspectos más positivos del protocolo elaborado por el Gobierno es que “ha contado con la participación activa de las organizaciones sociales, y de esta manera, hemos podido aportar cada una nuestra experiencia y conocimiento en los delitos de odio”.
En esta línea se manifestó también el presidente de Colegas, Paco Ramírez, quien además aseguró que este protocolo es “un instrumento que puede ser de mucha utilidad para las Fuerzas de Seguridad del Estado en la identificación de los delitos de odio mediante indicadores de odio precisos, un registro adecuado y pormenorizado, y sobre todo, como ayuda en los atestados dirigidos a jueces y fiscales”.
SEGUIR AVANZANDO
Eso sí, Paco Ramírez aseguró que desde su organización esperan que este sea un “primer paso de una estrategia más amplia y continuada” para lograr emerger muchos delitos de odio que hasta ahora aparecían como meras infracciones de insultos y agresiones.
Para ello, la presidenta de la Felgbt pidió que la teoría del protocolo se aplique en la realidad, que “no se baje la guardia,”, y que se implementen más medidas para luchar contra las agresiones que sufre este colectivo, “porque hay que hacer mucho más para que el sufrimiento de estas personas vaya a menos”.