El comercio ilegal de cigarrillos en México pasa del 2 al 10 % en un año

México, 10 oct.- El comercio ilegal de cigarrillos se disparó en México y ya representa el 10 % del mercado total de tabaco en el país, ocho puntos porcentuales por encima de los niveles que mantenía hace un año, informó hoy la Alianza contra Productos Ilegales (ACPI).

"Aparecieron en el mercado más de cien marcas ilegales contra treinta que se detectaron en 2010", denunció hoy en rueda de prensa Gerardo Velázquez, portavoz del organismo privado.

El pasado año la venta de cajetillas ilegales ascendió a "40 millones, contra 200 millones que se estiman para el final de 2011", reveló.

Explicó que, además, existe un efecto negativo por la "sobreregulación" del mercado del tabaco en México, un país con entre 10 y 11 millones de fumadores.

La ACPI criticó en particular el efecto en el tabaco del Impuesto Especial sobre Producción y Servicios (IEPS), que encareció la cajetilla en 7 pesos mexicanos (0,52 dólares) tras su aprobación hace un año.

Según la plataforma, la medida favoreció el comercio ilícito de tabaco y provocó que la recaudación del Servicio de Administración Tributaria (SAT) por ventas de tabaco disminuyera en el primer semestre de 2011 un 29,2%, lo que equivale a 6.090 millones de pesos (casi 455 millones de dólares), indicó Velázquez.

Además, la ACPI se pronunció en contra de un nuevo esquema de "licencias para venta" de cigarros en el país, cuya aprobación analizan los legisladores, pues "ocasionará mayor burocracia" y "trámites y costos innecesarios al mercado formal" poniéndole en desventaja frente al ilegal.

En la rueda de prensa, el director general de la Alianza Nacional de Pequeños Comerciantes (ANPEC), Cuauhtémoc Rivera, sostuvo que el cigarrillo ilegal que llega a México procede sobre todo de Paraguay, China, India y Vietnam.

Dijo que el precio promedio de la cajetilla de origen ilícito es de 13,8 pesos (1,02 dólares) y el del cigarrillo suelto, de 3 pesos (0,22 dólares), lo que hace que sea un producto muy buscado entre los nuevos fumadores, la mayoría de ellos jóvenes.

En este sentido, la ACPI pide al Congreso mexicano "no crear nuevas legislaciones" para el tabaco en el país "sin previa consulta con los sectores involucrados", así como potenciar las "políticas públicas que fomenten la legalidad".

A Hacienda y al servicio de aduanas les solicitan "que hagan efectivo el combate al contrabando" de cigarros ilegales, y a la Fiscalía, más contundencia contra "las bandas de contrabandistas que actualmente operan en todo el territorio nacional".

A la ACPI pertenecen la Asociación Nacional de Tiendas de Autoservicio y Departamentales (ANTAD), la de Abarroteros Mayoristas (ANAM), la Cámara de Comercio, Servicios y Turismo en Pequeño de Ciudad de México (Conacope), Alianza Nacional de Pequeños Comerciantes (ANPEC), entre otras organizaciones privadas.

También son parte de la plataforma British American Tobacco y Phillip Morris.