El primer objetor de España recibirá mañana Premio Constructores de Paz ICIP

Barcelona, 1 feb.- El colectivo de objetores e insumisos al servicio militar obligatorio en España, simbolizados en Pepe Beúnza, el primer español que se declaró en 1971 objetor por razones ideológicas, recibirá mañana el primer Premio Constructores de la Paz que concede el Institut Català Internacional per la Pau (ICIP).

La presidenta del Parlamento de Cataluña, Núria de Gispert, presidirá el acto, que también contará con la participación del presidente del ICIP, Rafael Grasa.

La junta de gobierno del ICIP decidió conceder este premio a los objetores e insumisos en reconocimiento a un colectivo "que representó una lucha larga y diversa contra el servicio militar obligatorio, que contribuyó a profundizar la democracia y a difundir los valores de la cultura de la paz".

Según el ICIP, el premio también quiere reconocer que este colectivo "popularizó, con el rechazo del uso de las armas, la objeción de conciencia, la desobediencia civil y la resolución no violenta de los conflictos".

El colectivo de objetores e insumisos se organizó desde el franquismo en diversas organizaciones, como el Movimiento de Objeción de Conciencia, GANVIA, Mili-KK o la Asociación de Objetores de Conciencia, pero su símbolo es Pepe Beúnza, el primer objetor de conciencia que se negó a prestar el servicio militar en 1971, por lo que fue sometido a dos consejos de guerra.

Por ello, el ICIP ha personalizado el premio en Pepe Beúnza (Valencia, 1948), que fue condenado a 15 meses de prisión y otros 18 en un batallón disciplinario en el Sahara Occidental.

A Beúnza le siguieron muchos otros objetores, como el reusense Víctor Boj o el alcoyano Jordi Agulló.

El I Premio ICIC Constructores de la Paz consiste en una distinción honorífica y una escultura creada por el Premio Nobel de la Paz Adolfo Pérez Esquivel.