Londres, 10 feb.- El Reino Unido sigue hoy en alerta tras la nevada que cayó anoche en buena parte del país por el peligro de hielo en las carreteras, que ayer ya provocó al menos 60 accidentes de tráfico sin víctimas mortales.
La mayor parte del territorio está en alerta amarilla, que insta a "ir con cuidado", mientras que algunas zonas tienen alerta "ámbar" -el segundo nivel más alto-, que aconseja "estar preparado" y tomar precauciones por los riesgos que plantea el tiempo.
El mayor problema hoy es la capa de hielo que han dejado la nieve y la lluvia en muchas carreteras del país, indicó la Oficina meteorológica.
La mayor nevada cayó la pasada noche en el condado de Lincolnshire (en el norte de Inglaterra), donde se registraron 8 centímetros de nieve, y la temperatura más baja, de 7 grados bajo cero, se localizó en el condado oriental de Norfolk.
En los próximos días se espera que continúen las bajas temperaturas, que podrían llegar a 9 grados bajo cero por la noche, si bien no se esperan nuevas nevadas.
De momento, los aeropuertos del Reino Unido continúan abiertos y no se esperan cancelaciones de vuelos, aunque las autoridades han recomendado a los pasajeros que comprueben el estado de su vuelo y salgan de casa con tiempo ante posibles contratiempos causados por el clima.
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