En busca de los misteriosos fotógrafos de Nueva York

Un pequeño bote llamó la atención de Todd Bieber mientras esquiaba, justo después de la tormenta de nieve, por el Prospect Park de Nueva York. En su interior se encontraba un objeto ya casi olvidado para muchos: un carrete fotográfico de 35 milímetros.

El joven rescató la película de lo que podía haber sido una tumba de nieve y tras revelar los negativos descubrió, artísticamente retratados, los paisajes nevados de Manhattan: el muelle de Coney Island extrañamente desierto, Central Park cubierto de niebla o bancos bajo la nieve en la playa.

Claramente los fotógrafos habían disfrutado de su tiempo en la ciudad y las imágenes habían sido tomadas con sumo cuidado.

Ante el hallazgo, Todd no pudo dejar de buscar al autor de las imágenes por lo que decidió montar un vídeo y subirlo al You Tube: "Por favor, escríbeme si reconoces a las personas que aparecen" escribe el joven, con la esperanza de que algún internauta en cualquier parte del mundo pueda reconocer a los autores.

Desafortunadamente, son pocos los rostros que se pueden distinguir en las imágenes. Los fotógrafos, según el propio Bieber, son dos jóvenes que aparecen en una de las instantáneas y que por su parecido físico podrían ser hermanos, posan con sus cámaras de fotos colgadas y tienen "aspecto europeo, aunque podrían ser de cualquier lugar".

Según Urlesque, el carrete fue encontrado el día 30 de diciembre a alrededor de las dos de la tarde, hacía un día soleado al igual que el clima reflejado en las instantáneas por lo que sospechan que las fotos se tomaron ese mismo día.

Son muchos los internautas que se han lanzado a identificar los lugares que aparecen retratados para intentar trazar el recorrido que realizaron los "misteriosos fotógrafos". De hecho, han localizado incluso el restaurante en el que los jóvenes se podrían haber parado a tomar algo: "Se encuentra en Brookly, en la calle 14 y avenida 7" asegura uno de los "rastreadores".

Sin embargo, otros muchos aseguran que todo se trata de un montaje del propio Bieber, antiguo redactor de la publicación satírica The Onion y aspirante a director de cine.