Experto avala trabajo de la universidad española en adaptarse a la tecnología

  • Miguel Arrufat, miembro del equipo de Didáctica en Internet de la Universidad Internacional de La Rioja (UNIR), ha asegurado a EFE que la universidad española, en general, realiza un amplio trabajo por adaptarse a los avances tecnológicos en educación, algo que requiere mucho tiempo y recursos.

Logroño, 22 nov.- Miguel Arrufat, miembro del equipo de Didáctica en Internet de la Universidad Internacional de La Rioja (UNIR), ha asegurado a EFE que la universidad española, en general, realiza un amplio trabajo por adaptarse a los avances tecnológicos en educación, algo que requiere mucho tiempo y recursos.

Esta es, ha explicado Arrufat en una entrevista a EFE, una de las conclusiones del III Congreso Internacional de Tecnologías Emergentes y Sociedad, que la UNIR ha clausurado hoy en Logroño.

El potencial que ofrece la tecnología aplicada a la enseñanza superior "es extraordinario", ha asegurado y "muchas universidades tienen equipos de trabajo en ese campo" aunque "hay factores que limitan ese desarrollo" especialmente las necesidades de tiempo y de recursos materiales y humanos.

"La ventaja para UNIR es haber nacido en internet y tener desde el primer día esa orientación, mientras que la primera obligación de un profesor en una universidad tradicional es atender un calendario de clases presenciales muy intenso", ha considerado.

Sin embargo, ha insistido, "la universidad española está avanzando en este campo" especialmente en aplicar a sus clases tecnologías ya desarrolladas, como las redes sociales o los blogs.

Por eso y por los proyectos de investigación de muchos campus españoles cree que "como país España no va a quedar fuera de ese avance".

Como ejemplo a los conceptos de futuro en los que se trabaja en la universidad española, ha detallado Arrufat, en el congreso se han analizado tres grupos de tecnologías que incidirán en el futuro en la educación superior.

Por un lado, ha detallado, hay aplicaciones "que están bastante adoptadas ya" por las universidades, como blogs o las redes sociales, en las que se investiga como lograr su mayor aprovechamiento didáctico.

Otro grupo de tecnologías aplicadas a la educación lo conforman prácticas que "casi empiezan en España, pero están más desarrolladas en otros sitios, en especial en Estados Unidos".

Entre esas aplicaciones está la conocida como "Aula invertida" que consiste en "reorganizar el contenido de las clases presenciales" y hacer que los alumnos recoja información y hagan actividades en el campus, y dediquen las clases "a una mayor comprensión de los temas, no a ofrecer un contenido sobre el que el estudiante ya ha tenido que trabajar".

El "Aula Invertida" ofrece "resultados didácticos extraordinarios", ha afirmado Arrufat, quien ha detallado que la UNIR ya ha adoptado este sistema en sus clases.

También existe la posibilidad del "learning-analitic" (aprendizaje analítico), que consiste en emplear todos los datos obtenidos del alumno (en el caso de la UNIR a través de internet) para detectar sus necesidades y adaptar el aprendizaje para dar más tiempo a aquello en lo que tiene dificultad y menos a lo que domina.

De hecho, la UNIR ya imparte "refuerzos" a unos 400 de sus 20.000 alumnos tras detectar mediante el análisis de sus datos educativos qué tienen necesidades especiales en algunas materias.

Esta universidad, ha detallado Arrufat, pretende profundizar en ese concepto y para ello participa en tres proyectos de la Unión Europea sobre "aprendizaje adaptativo".

"En realidad, pasa como en otras cosas, la tecnología surge en campos diferentes y se aplica a la educación, y antes de aplicarlo a la universidad ya hay grandes empresas que cuentan con departamentos de análisis de datos para conocer las necesidades especiales de las personas".

Además, ha añadido, existen tecnologías "que no han empezado" todavía en la universidad "o están muy al principio" como las aplicaciones basadas en el gesto -similares a las de los mandos de videojuegos-, que pueden ser útiles en el futuro en las enseñanzas de medicina o ingeniería.

Y existen "tecnologías todavía inmaduras" pero que en el futuro afectarán a la educación superior, como la realidad aumentada o los sistemas operativos sociales, ha finalizado Arrufat.

Mostrar comentarios