Nueva York, 9 ago.- Las autoridades de EEUU investigan si el hombre que confesó haber agredido a martillazos a un turista español en un parque de Nueva York ofreció una identidad falsa cuando fue detenido, después de que apareciera un ciudadano canadiense con el mismo nombre.
La investigación sobre el caso está centrada en averiguar si el agresor es en realidad John Yoos, como se le identificó inicialmente, o bien usó una identidad falsa al ser detenido, informaron hoy a Efe fuentes de Fiscalía de Manhattan, que trabaja en el asunto en colaboración con las autoridades federales.
"Existen dudas sobre la identidad del agresor y en ese camino sigue adelante la investigación", dijeron fuentes de la oficina del fiscal Cyrus Vance, quienes detallaron que el baile de identidades no es algo anormal en este tipo de casos.
La alarma sobre la supuesta falsa identidad de Yoos saltó cuando un ajedrecista residente en Vancouver (Canadá) se enteró del caso y comprobó que no sólo coincidían sus nombres sino también la edad, 43 años, lo que le llevó a ponerse en contacto con las autoridades estadounidenses.
El agresor del turista español, encarcelado sin fianza en la prisión de Rikers Island desde el pasado 31 de julio, compareció el 3 de agosto ante un juez de Nueva York, que le notificó que un jurado popular ha encontrado suficientes pruebas como para seguir adelante con el caso y fijó la nueva vista para el 28 de agosto.
Será entonces cuando el juez le comunique formalmente los cargos de los que el jurado le imputó, después de que la Fiscalía de Manhattan lo acusar de un cargo por intento de homicidio no premeditado, dos por asalto y otro por posesión criminal de arma blanca.
Hugo Alejandre, barcelonés de 31 años, había viajado de vacaciones a Nueva York con su novia, y se encontraba el 30 de julio sentado en un banco del parque del Ayuntamiento cuando, sin mediar palabra, un hombre "muy trajeado y con apariencia normal" empezó a agredirle con un martillo "de grandes dimensiones" en la cabeza, el brazo, la espalda y el abdomen, según relató él mismo.
El agresor confesó a la Policía haber golpeado aproximadamente diez veces a Alejandre con un martillo, al menos una de ellas en la cabeza, y además los agentes encontraron en el bolsillo de la chaqueta un cuchillo de cocina con una hoja de casi 13 centímetros de largo.
Tras la agresión, dos transeúntes se abalanzaron sobre el atacante, quien fue retenido en el lugar de los hechos hasta que acudieron hasta allí varios agentes de las fuerzas de seguridad, según explicó entonces a Efe un portavoz de la Policía.
El barcelonés fue llevado inmediatamente al hospital Bellevue de Nueva York con una fractura en la columna vertebral y varios cortes profundos, pero recibió el alta ese mismo día y regresó el 1 de agosto a España, tras haber acudido a la Fiscalía de Nueva York para explicar lo sucedido.
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