"En total hay en la provincia, contando el centro y los alrededores, un total de 80 castillos que intentamos preservar", ha indicado el director del Departamento de Información y de Cultura de la provincia, Farid Ahmad Farhang.
Sin embargo, de ellos la mitad se encuentran en zonas bajo control talibán, que suelen utilizar los muros para resguardarse de los bombardeos y ataques por tierra de las fuerzas afganas e internacionales.
Entre ellos se encuentra por ejemplo el castillo de Bost, "lugares históricos que han sido capturados o están siendo destruidos", ha lamentado uno de los integrantes del departamento, Abdulá Zahir, a la cadena de televisión afgana Tolo.
A los combates hay que añadir otros factores de deterioro, como las lluvias, las tormentas y las crecidas del agua del río Helmand. Solo los jóvenes intentan proteger los castillos de la provincia, donde trabajan en labores de reconstrucción los fines de semana.
Hemos bloqueado los comentarios de este contenido. Sólo se mostrarán los mensajes moderados hasta ahora, pero no se podrán redactar nuevos comentarios.
Consulta los casos en los que lainformacion.com restringirá la posibilidad de dejar comentarios