Los menores del incidente del CEIP José María del Campo seguirán en el centro mientras se instruye el caso

EUROPA PRESS
EUROPA PRESS

La delegada territorial de la Consejería Educación de Sevilla, María Francisca Aparicio, ha asegurado este lunes que en el colegio público José María del Campo, donde un alumno habría sido víctima de una agresión por parte de otros escolares, no figura desde 2013 "denuncia" alguna relacionada con situaciones de acoso escolar, exponiendo que los menores relacionados con la incidencia señalada continuarán en el centro hasta el final del procedimiento instruido para esclarecer los hechos, dentro del protocolo de actuación de convivencia y acoso escolar.

Así, la delegada territorial ha manifestado ante los medios de comunicación que este pasado viernes se tuvo conocimiento de este hecho, en concreto a través de la dirección del centro, por lo que de inmediato se ha activado el protocolo de acoso y de convivencia regulado por la propia Consejería de Educación.

Según ha detallado, este protocolo tiene un procedimiento en el que hay diferentes momentos de actuación. Así, este lunes la Delegación, junto con la Inspección y con la dirección del centro, se ha reunido con las familias de los menores relacionados con la situación detectada, tanto con los progenitores del menor presuntamente agredido, como con los familiares del resto de menores supuestamente involucrados.

En el encuentro se han contrastado todas las versiones y todas las actuaciones posibles, así como se continua con el protocolo establecido. "Cuando tengamos todo el procedimiento con toda la información y totalmente contrastado, se pondrá en conocimiento de la Fiscalía de Menores", ha apuntado la delegada del ramo.

En este sentido, ha asegurado que todos los menores relacionados con esta incidencia van a continuar en el centro, porque "deben estar en el centro hasta que no se termine el procedimiento, al igual que el alumno agredido". A este respecto, Aparicio ha indicado que "el centro tiene activado las acciones que garantizan absolutamente que todos los diferentes alumnos estén en el mismo centro".

EL CENTRO TIENE LA DECISIÓN FINAL

Así, cuando se termine el procedimiento, "que es largo y que ahora estamos en los inicios", según la delegada, será la propia dirección del centro la que establezca cuáles son las actuaciones en función de "cómo se catalogue esa infracción, en el caso de que lo hubiera habido". "Son niños menores y evidentemente, cada familia da su versión", ha señalado Aparicio, quien ha adelantado que desde la Delegación no van a dar "ninguna versión", hasta que no sepan toda la información y puedan contrastarla.

Al ser preguntada si el centro tenía constancia de este supuesto acoso, ya que la madre del menor presuntamente agredido ha denunciado supuestas prácticas de acoso durante los dos últimos años, la delegada ha indicado que desde la Junta tienen que recabar toda la información y tratarla según el protocolo establecido.

No obstante, Aparicio ha afirmado que en el colegio José María del Campo "no existe desde el año 2013 ninguna denuncia de ninguna acción contraria a la convivencia escolar de ninguna familia, ni de la propia familia denunciante".

La delegada ha detallado que "todo sucede en el comedor escolar, donde una monitora escolar ve como se produce un conflicto entre dos alumnos". En este enfrentamiento, "ella misma actuó aplicando el protocolo de mediación y, como es normal en estos caso, los dos alumnos se entendieron y acabaron su disputa", ha agregado, defendiendo que "la dirección del centro se ha puesto en contacto" con la madre que ha denunciado un supuesto caso de acoso escolar, interesándose por el estado de su hijo.

Igualmente, ha reiterado que este lunes ella misma le ha preguntado directamente a la familia y la madre y ha comentado que el menor se encuentra "relativamente intranquilo". De esta forma, ha indicado que no se puede confirmar o descartar que haya "acoso" escolar, hasta que no se recabe toda la información necesaria que verifique los hechos y se contrasten los protocolos llevados a cabo.

La delegada, al respecto, ha recordado que este centro tiene un proyecto educativo centrado en la mediación con el Ayuntamiento de Sevilla y la Universidad Pablo de Olavide (UPO) que ayuda a resolver los pequeños conflictos que puedan existir en las aulas.

En el marco de este hecho, ha recordado que los también profesores tienen que denunciar al propio centro cuando haya algún tipo acción directamente a la dirección. "El protocolo se establece cuando hay alguna denuncia en el propio centro y, en el momento que llega, se articula este procedimiento", ha asegurado.

Así las cosas, ante este caso de un menor presuntamente agredido por sus compañeros en el citado centro de Sevilla, el protocolo contiene actuaciones educativas, de convivencia, mediación y de control para "averiguar las acciones y verificar si hay acoso o no", por lo que según ha concluido la delegada del ramo "hay que contrastar todo antes, por lo que no se puede verificar como tal".

Mostrar comentarios