Jane Fonda reconoce que es presumida

La actriz de 73 años admite que siempre ha sido consciente de su apariencia física y que quiere sentirse lo mejor posible cada vez que sale a la calle, por eso intenta acentuar su partes buenas cuando se viste."Soy presumida. Mis brazos son finos, pero presumo de carne floja. Y también soy muy cuidadosa con lo que me pongo, intentando mostrar mis mejores partes, que son mi cintura y mi trasero".Sin embargo, Jane es consciente de que no puede vestir demasiado juvenil por su edad."Tengo gente en mi vida que dirá: 'Cariño, te estás pasando', dijo."Me gusta ser descarada, pero tengo 73 años y medio. Aún estoy intentando encontrar mi camino entre la exuberancia y la madurez".Jane - que combatió la bulimia en el pasado - ha tenido una larga batalla con su propia imagen. En parte, éste fue el factor que echó a perder la relación con su padre, el actor Henry Fonda."Alcancé la fama en la década de los 50. Mi padre me enseñó que todo lo que importaba era mi apariencia, francamente", dijo."Él era un buen hombre, y yo estaba loca por él. Pero me decía cosas que los padres no deberían decir: 'A menos que estés perfecta, nadie te querrá'".