La familia de un español fallecido en una cárcel de ecuador no puede pagar los 1.000 euros de su repatriación

El pasado lunes falleció en la prisión ecuatoriana de Lacatunga el ciudadano español Ronaldo Guillermo Smith Soto. Sus restos mortales no han sido repatriados a España debido a que su familia no puede hacer frente al pago de 10.000 euros que cuesta traer su cuerpo a San José de la Rinconada (Sevilla), localidad de la que era vecino.
La familia de Smith Soto, que llevaba dos años y cuatro meses preso en Ecuador por intentar sacar droga de ese país, recibió una llamada de la Embajada de España en Quito, sobre las 15.30 horas del pasado lunes, en la que les informaban de su muerte, según contó a Servimedia Arabia, una de las hijas del fallecido.
La familia duda de la versión oficial del fallecimiento de Smith Soto, que establece que murió como consecuencia de un paro cardiaco, “hasta que tengamos una autopsia que certifique que esto ha sido así”.
La hija de Soto lamentó que lo único que han recibido de las autoridades españolas “han sido las prisas de la embajada para que decidiéramos lo que íbamos a hacer con el cuerpo de mi padre”, al tiempo que reprochó que “hasta el momento, no hemos recibido ningún tipo de ayuda ni de asesoramiento”.
Por esa razón, hoy la familia acudió al Colegio de Abogados de Sevilla “para ver si nos pueden dar algo de asesoramiento”. Su hija también anunció que se pondrá en contacto con el Ministerio de Asuntos Exteriores para solicitar ayuda.
El coste para repatriar el cuerpo de Smith Soto, que deja tres hijos de 22, 12 y ocho años, asciende a los 1.000 euros. Las únicas alternativas que la familia ha recibido han sido traer sus restos incinerados por 900 euros o enterrarlo en Ecuador, “una posibilidad que no contemplamos”.