La Fiscalía constata la vigencia de métodos ilegales de caza como la cola

  • La Fiscalía General del Estado ha constatado la "vigencia" de métodos de caza ilegal masivos como el uso de la cola en las ramas de los árboles para que las aves se queden pegadas o la red japonesa, una red invisible para atrapar pájaros.

Madrid, 18 sep.- La Fiscalía General del Estado ha constatado la "vigencia" de métodos de caza ilegal masivos como el uso de la cola en las ramas de los árboles para que las aves se queden pegadas o la red japonesa, una red invisible para atrapar pájaros.

En su Memoria anual de 2011, publicada hoy, cita cómo la Fiscalía de Barcelona destaca la recepción de un "elevado número" de atestados redactados por los agentes rurales relativos a éstas prácticas ilegales.

Añade la Fiscalía que se trata de métodos "bastante extendidos" no solo en zonas costeras de la península, sino también en el interior.

Sobre el uso de cebos envenenados cita a la Fiscalía de Cantabria y a su llamada de atención sobre el "preocupante incremento" de denuncias sobre el uso de estos cebos, que están provocando la muerte de numerosos ejemplares de distintas especies animales.

Es tal el efecto devastador del veneno, añade la memoria, que iniciativas altamente positivas tendentes a la recuperación de especies en vías de extinción, pueden verse abocadas al fracaso.

Así, y según la Fiscalía de Asturias, de los dos quebrantahuesos traídos de Aragón y soltados en la zona asturiana del parque Nacional de los Picos de Europa, uno de ellos apareció muerto en el concejo de Peñamellera Alta, y aunque las pruebas toxicológicas no fueron concluyentes una serie de indicios "apuntaban de forma bastante evidente" la muerte por consumo de veneno.

En ocasiones, la colocación de cebos con veneno tiene lugar incluso en el recinto vallado de una propiedad privada, aparentemente por el propietario de la misma, con el objetivo de evitar el acceso de depredadores al recinto en el que se hallan las aves de corral.

Ese es el caso descrito por la Fiscalía de Jaén y que provocó la muerte de un lince ibérico.

También los cebos envenenados se dejan en parques públicos provocando la muerte de animales domésticos, como refiere la Fiscalía de Palencia.

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