La gobernadora de Arizona apuesta por el voto del miedo

  • La gobernadora del estado de Arizona, Jan Brewer, ha llegado hasta esta conclusión: a la gente corriente le dan mucho más miedo los traficantes de droga mexicanos que los friegaplatos mexicanos.Así que Brewer, que está en campaña electoral de cara a los comicios parciales de noviembre, ha decidido meterlos a todos en el mismo saco: todos los mexicanos son iguales a sus ojos después de todo. El prestigioso periodista Rubén Navarrete Jr. ofrece analiza la política de inmigración de la gobernadora desde la frontera de Estados Unidos con México.
Brewer dice que la mayoría de los inmigrantes ilegales son "traficantes de drogas"
Brewer dice que la mayoría de los inmigrantes ilegales son "traficantes de drogas"
Rubén Navarrete Jr. | Colaboración especial para GlobalPost

(San Diego, EEUU en la frontera con México). El debate sobre inmigración en Estados Unidos va camino de convertirse en otro caso Willie Horton [un preso condenado a cadena perpetua que se benefició en los años 80 de un programa de permisos carcelarios durante el cual cometió diversos crímenes, algo que dio lugar a un enfrentamiento entre republicanos y demócratas, impulsores del programa].

Las tácticas del miedo comenzaron en abril, en la ceremonia en la que Brewer firmó la ley 1070 del senado de Arizona, una pieza legislativa deshonesta y divisoria que convierte a la policía local en una pandilla que va a la caza de inmigrantes ilegales basándose en "sospechas razonables". Promueve una forma de vigilancia estatal en la que si la gente decide que la aplicación de la ley no está siendo correcta, pasa a tomar las riendas por su cuenta.

Al firmar la ley Brewer habló de "violencia y crímenes relacionados con la frontera por la inmigración ilegal", y dijo que los habitantes de Arizona "no podemos sacrificar nuestra seguridad por la avaricia asesina de los cárteles de la droga" o "permanecer quietos mientras los pisos francos, los secuestros y la violencia comprometen nuestra calidad de vida". Tampoco pueden "retrasarse mientras la destrucción que se produce al sur de nuestra frontera internacional va abriéndose camino hacia el norte", dijo.

Ya lo sé. Arengas como esas le hacen a uno querer coger una Winchester.

Posteriormente, Brewer redobló la "narco demagogia" (la Conexión Mexicana, si se prefiere) durante un debate entre los candidatos republicanos a la gobernación. Aseguró que la mayor parte de los inmigrantes ilegales trabajan como mulas para los cárteles mexicanos. Cuando un periodista le pidió que dijese en qué basaba su afirmación, se quedó sin argumentos.

"Todos sabemos que la mayor parte de las personas que entran ilegalmente en Arizona se convierten en mulas [de narcotráfico]", le dijo Brewer al periodista. "Están cruzando las fronteras en cantidades enormes. Los cárteles de la droga han tomado el control de la inmigración... Están incumpliendo la ley cuando entran en ilegalmente y se convierten en criminales cuando traen mariguana y drogas consigo".

Al ser presionada sobre este asunto, Brewer reconoció que muchos inmigrantes ilegales entran en EEUU para buscar trabajo, pero insistió en que eventualmente "son abordados y se convierten en sujetos de los cárteles de las drogas".

Rápido. Que alguien le saque la pala de las manos antes de que siga cavando aún más hondo.

El senador republicano John McCain, de Arizona, asegura que Brewer no tiene razón en sus comentarios sobre las drogas, y que él no cree que la mayor parte de los inmigrantes ilegales trabajen como mulas para los cárteles.

Lo mismo ha dicho T.J. Bonner, jefe del National Border Patrol Council, el sindicato que representa a casi 20.000 agentes de patrullas fronterizas. Uno diría que ellos saben una o dos cosas sobre quienes cruzan la frontera y qué traen consigo. Bonner dijo a la CNN que las afirmaciones de Brewer "claramente no son el asunto" y "no se ajustan a la realidad".

Secundo eso. En mis muchas conversaciones con agentes de las patrullas de frontera y supervisores durante los últimos 15 años se me ha quitado de la cabeza la idea de que los traficantes de drogas se dedican al negocio de los inmigrantes ilegales, y viceversa. Cada uno de los negocios va por un camino separado, y así nadie pierde la cabeza.

Es cierto que algunos inmigrantes ilegales, cuando son detenidos, llevan bolsas de mariguana o de cocaína pegadas al cuerpo. Pero son "algunos", no "la mayoría". Además, como destaca Bonner, solo porque muchos de estos inmigrantes intenten eludir su responsabilidad diciendo que fueron obligados a hacerlo por los cárteles, eso no quiere decir que sea cierto. Los cárteles mueven grandes cantidades de mercancía, y no se complican por unas migajas.

Pero ¿qué sabemos nosotros? Esto son solo hechos, y a Brewer eso no le sirve, especialmente en medio de una campaña política.

En el mes de abril, durante la ceremonia de firma de la ley SB1070, Brewer intentó calmar la inquietud de quienes se mostraban preocupados por la forma en que se aplicaría la ley. "No toleraré la discriminación racial o por etnias en Arizona", aseguró.

Ahora Brewer está haciendo eso ella misma al dibujar a cada inmigrante ilegal en el estado como una mula para los cárteles de las drogas.

Al mezclar las manzanas de la guerra de las drogas en México con las naranjas de la guerra de relaciones públicas contra los inmigrantes ilegales que alimentan los políticos republicanos, Brewer espera introducir el factor del miedo en los votantes y aumentar el apoyo público a cada idea inhumana y alocada que ella o sus colegas anuncien para conseguir que Arizona se convierta en un lugar intolerante para los sin papeles.

Es justo. Después de todo, son los llamados inmigrantes "ilegales" quienes durante los últimos 15 años han construido las casas, cuidados los jardines, servido la comida, limpiado las casas, cocinado las comidas y cuidado a los niños del estado del Gran Cañón, y lo han hecho más habitable para todos los demás.

Rubén Navarrette Jr. es un columnista sindicado del Washington Post Writers Group, comentarista habitual de la National Public Radio y colaborador semanal de CNN.com en Estados Unidos.

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