La lluvia obliga a suspender la procesión de Cofradía del Silencio de Zamora

  • La Real Hermandad del Santísimo Cristo de las Injurias ha tenido que suspender esta tarde su procesión debido a la lluvia, "para no dañar el paso del Cristo", según ha afirmado el presidente de la cofradía, Rufo Martínez, al anunciar la suspensión de la procesión.

Zamora, 4 abr,.- La Real Hermandad del Santísimo Cristo de las Injurias ha tenido que suspender esta tarde su procesión debido a la lluvia, "para no dañar el paso del Cristo", según ha afirmado el presidente de la cofradía, Rufo Martínez, al anunciar la suspensión de la procesión.

La Cofradía del Silencio ha decidido suspender la procesión cuando los más de 2.300 cofrades ya estaban reunidos en la Plaza de la Catedral para el Juramento del Silencio que da comienzo a esta procesión.

La lluvia no estaba siendo muy intensa pero si persistente en el momento en el que estaba prevista la salida de la procesión y, además, la previsión meteorológica daba más precipitaciones para las próximas dos horas, coincidiendo con el desarrollo de la procesión.

El Juramento del Silencio es uno de los momentos más emblemáticos de la Semana Santa de Zamora, que está declarada de Interés Turístico Internacional, y no ha llegado a producirse ya que la procesión se ha suspendido justo antes.

Lo que sí ha tenido lugar es la Ofrenda del Silencio que ha realizado la alcaldesa de Zamora, Rosa Valdeón, que ha pedido al Cristo de las Injurias que "tenga los brazos abiertos a mujeres y hombres de este tiempo, para que nuestra tierra pueda volver al camino del empleo de la paz social y del progreso".

Valdeón ha destacado que "en estos tiempos difíciles y complejos, Zamora viene a poner en valor el sentido de este encuentro. El sentido de unidad, de generosidad, de compromiso y de respeto".

Durante la Ofrenda del Silencio, ante el Cristo de las Injurias y cientos de cofrades en la Plaza de la Catedral, la alcaldesa ha pedido "amparo para los que no tienen nada, para los que necesitan un trabajo, para los que sufren, los enfermos, los marginados y los excluidos".

Después de esa Ofrenda del Silencio, el obispo de la diócesis de Zamora, Gregorio Martínez Sacristán, pide a los cofrades que juren silencio ante el Cristo de las Injurias, pero cuando debía producirse es cuando se ha decidido suspender la procesión y guarecer la talla del Cristo otra vez en el interior de la Catedral.

La Real Hermandad del Santísimo Cristo de las Injurias es una de las más numerosas de la Semana Santa de Zamora, con más de 2.300 cofrades que abarrotan la Plaza de la Catedral durante el Juramento del Silencio. EFE

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