La madre que sacó a tortas a su hijo en Baltimore no quería que se echara a perder

Toya Graham se ha convertido en el ejemplo de madre coraje, su historia ya es conocida a lo ancho del mundo: fue ella la que, al ver que su hijo se embozaba para participar en las protestas de Baltimore, decidió tomar cartas en el asunto y propinarle unos golpes para que saliera de la manifestación.

"No quería que al final del día mi hijo se conviertiera en otro Freddy Gray", dijo en declaraciones a la cadena americana CBS. La madre se explicó, no quería que su hijo se echase a perder. Graham es madre soltera de seis hijos, el joven Michael de 16 años, y cinco hijas más.

"Soy una madre intolerante. Todo el que me conoce sabe que no me ando con juegos", dijo a esta cadena televisiva.

Y agrega que "ponerse ahí, de pie, frente a la policía y cometiendo actos vandálicos no es justicia. "Michael no es el chico perfecto, pero es mi hijo".

"Estaba muy enfadada y sorprendida, una no quiere ver a su hijo en esa situación", ha defendido.

Toya Graham ha sido elogiada por la policía, su comportamiento, señalaban, debería ser copiado por más madres que no saben qué hacen sus hijos o si han estado presentes en los disturbios de estos días en la ciudad de Baltimore.

La reprimenda que se llevó el joven Michael fue contundente, en las imágenes se ve cómo su madre lo saca a golpes y collejas de la zona del tumulto. Según ha trascendido en los medios de comunicación, Michael está castigado sin salir de casa por haber acudido embozado a los disturbios de Baltimore.

Las protestas del pasado lunes se convirtieron en violentas, con intensos disturbios en partes de la ciudad de Maryland, EEUU. Ya se han tranquilizado las manifestaciones, en parte gracias al toque de queda impuesto por la alcaldesa de la ciudad y por la presencia de más de 3.000 agentes de policía y seguridad en las calles.