La nueva ayuda a los parados se financiará en parte con el “ahorro” en bonificaciones a la contratación

El nuevo programa de formación a los parados, que incluye una ayuda económica a aquellos que no cuenten con ninguna renta, estará financiado en parte por el “ahorro” en el gasto en bonificaciones a la contratación que el Gobierno espera que se produzca en 2011.
Así lo explicaron en rueda de prensa el ministro de Trabajo e Inmigración, Valeriano Gómez, y la secretaria de Estado de Empleo, María Luz Rodríguez, donde reiteraron que esta ayuda será exclusivamente para aquellos que tengan “una carencia absoluta de rentas” y en función de los cursos que realicen.
Esta ayuda se costeará en parte con el menor gasto en bonificaciones a la contratación fruto de la reforma laboral, que redujo el colectivo de personas que podrían acceder a ellas.
El resto de la financiación provendrá de la reorientación del gasto en formación de los trabajadores y de un adelanto de las inversiones del Fondo Social Europeo previstas para los años 2012 y 2013.
Sin embargo, el ministro no quiso entrar en detalles sobre los requisitos que se establecerán para acceder a la ayuda ni sobre la cuantía de la misma.
Según Gómez, el objetivo es que el Gobierno y las comunidades autónomas puedan ofrecer “servicios en el ámbito de la inserción para tratar individualizadamente a los parados y, para quienes lo necesiten, poder tener dispuesta la posibilidad de ayudarles económicamente”.
Por su parte, Rodríguez explicó que el Gobierno no tiene cuantificado cuál puede ser el ahorro en bonificaciones, pero aclaró que las mayores aportaciones a la financiación de este programa serán las que provengan de la “reorientación de los casi 2.300 millones de euros que se destinan a la formación de ocupados”.
A esto se sumará el adelanto de las inversiones del Fondo Social Europeo, algo que “hacen otros países de nuestro entorno”.
El ministro apuntó que el final del Programa Temporal de Protección por Desempleo e Inserción (Prodi), que incluye la ayuda de 426 euros a los parados, “estaba anunciada dado su carácter excepcional”.
Sin embargo, añadió que el nuevo programa de formación tendrá un carácter “estable” y será “más robusto” que el Prodi.
También subrayó que estará dirigido a las personas cuyas “posibilidades de encontrar empleo estable y salir de una situación de elevada rotación laboral son muy reducidas”.
Sobre el Prodi, Gómez afirmó que “no ha arrojado malos frutos” y que el Gobierno “se siente orgulloso de sus resultados”.
El ministro se refirió también a la reforma del sistema de pensiones y reiteró que el Ejecutivo mantiene su pretensión de lograr un acuerdo con los agentes sociales.
No obstante, admitió que “los márgenes son estrechos” pero añadió que “siempre hay posibilidades” y recordó que “en ocasiones han acabado con acuerdos importantes”. “El Gobierno tiene la obligación de intentarlo, con sindicatos y empresarios y de intentar un amplio consenso parlamentario”, aseveró el ministro.